Osborne vincula su vuelta a ventas pre Covid a la recuperación de su negocio de restauración
El grupo no descarta nuevas compras en el año de su 250 aniversario
El Grupo Osborne cumple 250 años durante este 2022, un ejercicio que encara con "buen ánimo" aunque con los temores propios del impacto que la crisis geopolítica pueda suponer en el ánimo del consumidor, además de en la inflación, cuyos efectos ya se están dejando notar.
Así lo cree su consejero delegado, Fernando Terry, que cree que la situación exigirá una toma de decisiones casi al día para capear el temporal. "Nos va a hacer estar mucho más atentos mes a mes, semana a semana", dice, aunque la compañía cuenta con superar los números alcanzados en 2021. La compañía no los ha hecho públicos al estar aún cerrando las cuentas anuales del ejercicio, aunque se califica como un buen año en el que se superaron "ampliamente las expectativas de negocio". Terry destaca la buena evolución del mercado internacional, de las ventas en el canal de la distribución alimentaria y en el online, además de las ventas internacionales.
Queda pendiente la recuperación de su negocio de restauración, lastrado por la pandemia. Sin este, el grupo ya habría alcanzado las ventas de 2019. De su recuperación dependerá la evolución de la pandemia y, como en el resto de negocios, el ánimo del consumidor. En todo caso, para el conjunto del grupo, Terry cree que el segundo semestre del año mostrará una mayor velocidad de crecimiento.
Pese al contexto, Osborne continuará contemplando adquisiciones, tras comprar en septiembre pasado la compañía de caviar ecológico Riofrío. Según Terry, las compras futuras irán dirigidas a categorías más desarrolladas dentro del grupo, como bebidas espirituosas, vinos o ibéricos. De hecho, el consejero delegado cree en la D.O. Ribera de Duero "sería bueno estar", aunque descartó negociaciones en curso para una operación.