Orange adjudica a Ericsson su contrato clave de 5G en España
Será su proveedor para la red 'core' 5G Stand Alone
El Grupo Orange ha elegido a Ericsson como proveedor de su red core en 5G Stand Alone (5G SA) en España. La operadora ha señalado que el despliegue de soluciones 5G SA es un hito importante que permitirá el desarrollo futuro de servicios de valor añadido, bajo demanda y personalizados para sus clientes de en todos los sectores de la economía.
“Para Orange, 2022 es un año de preparación, pruebas y despliegue para facilitar los lanzamientos comerciales a partir de 2023”, explica la teleco.
En un comunicado, Orange señala que 5G SA ofrece un mayor rendimiento en términos de velocidad de subida (uplink) y una menor latencia. A su vez, para las empresas, satisface la necesidad de conectividad flexible, escalable, confiable y segura para usos en tiempo real. “A través de su capacidad network slicing, esta red permitirá priorizar recursos de red para cubrir usos críticos o necesidades específicas y ofrecer diferentes niveles de calidad y seguridad”, indica la operadora.
De igual forma, 5G SA y network slicing también permitirán a Orange evolucionar su gama de soluciones de redes privadas móviles. “Para satisfacer las necesidades de los clientes empresariales, una primera opción es crear una red privada virtual en la red pública de Orange”, destaca la teleco, que añade que una segunda solución consiste en crear una red privada híbrida basada en equipos compartidos en la red de Orange y equipos dedicados en la sede del cliente para flujos y datos críticos.
Según la operadora, la tecnología ya está disponible para aprender, probar e innovar con las empresas interesadas en los sitios de Orange 5G Lab, y se puede implementar a nivel mundial bajo demanda para clientes B2B con las soluciones de red privada de Orange Business Services.
En Francia, su principal mercado, Orange ha adjudicado los despliegues de 5G SA a la finlandesa Nokia.
En los últimos años, las operadoras occidentales han apostado por contratar por los grupos europeas, Ericsson y Nokia, y también por coreanos como Samsung, ante las sanciones que EE UU ha impuesto a la china Huawei, hasta ahora el principal fabricantes de equipos de redes de telecomunicaciones.