Fridman, el dueño de DIA, critica el conflicto en Ucrania y urge a negociar la paz
Asegura en una carta a la plantilla de Letter One, su firma de inversión, que es una tragedia para ambos países y pide poner fin al "derramamiento de sangre" Otro multimillonario ruso, Oleg Deripaska, también pide poner fin al conflicto
El multimillonario ruso y dueño de los supermercados DIA, Mikhail Fridman, ha pedido poner fin al conflicto en Ucrania. En una carta enviada a la plantilla de LetterOne, su firma de inversión situada en Londres, el magnate asegura que es una "tragedia" para la gente de ambos países y pide poner fin al "derramamiento de sangre".
El magnate cuenta en la misiva que nació en el oeste de Ucrania y vivió allí hasta los 17 años. "Mis padres son ciudadanos ucranianos y viven en Lviv, mi ciudad favorita". "Pero también he pasado gran parte de mi vida como ciudadano de Rusia, levantando y haciendo negocios. Estoy profundamente apegado a los pueblos de Ucrania y Rusia y veo el actual conflicto como una tragedia para ambos", informa Reuters, que ha tenido acceso a la misiva.
Fridman añadió en la carta que el conflicto estaba abriendo una brecha entre los dos países, que han sido hermanos durante siglos.
La reacción del empresario ruso, pronunciándose contra esta guerra, llega mientras EE UU, Reino Unido y la UE preparan nuevas sanciones contra oligarcas que tienen una presencia significativa en Occidente.
Otro multimillonario ruso, Oleg Deripaska, también ha pedido poner fin al conflicto desatado entre ambos países. En su caso lo hizo a través de una publicación en Telegram y ha pedido que las conversaciones para la paz comiencen "lo antes posible". "La paz es muy importante", dijo el fundador del gigante ruso del aluminio Rusal, en el que todavía tiene una participación.
Como recuerda Reuters, Washington impuso sanciones a Deripaska, entre otros, por su lazos con Vladimir Putin tras la supuesta injerencia rusa en las elecciones estadounidenses de 2016, un hecho que Moscú niega.
Los oligarcas rusos se enfrentan al caos económico después de que Occidente haya impuesto severas sanciones a Rusia por la invasión de Ucrania.
Fridman, que posee una fortuna de unos 15.500 millones de dólares, según Forbes, ha señalado que "si bien una solución parece terriblemente lejana, solo puedo unirme a aquellos cuyo ferviente deseo es que termine el derramamiento de sangre y estoy seguro de que mis socios comparten mi opinión".
Uno de los socios del dueño de DIA es Pyotr Aven, quien asistió esta semana a una reunión en el Kremlin con Putin y otros 36 importantes empresarios rusos. Según publica el Financial Times, el magnate y sus socios poseen el banco ruso Alfa-Bank, la cadena de supermercados X5 y la operadora de móviles Veon. Fridman también es dueño de Holland & Barrett.
Otro multimillonario de Moscú aseguró a Reuters bajo la condición de anonimato que "la guerra va a ser una catástrofe en todos los sentidos: para la economía y para las relaciones con el resto del mundo". Y aseguró que los multimillonarios que se reunieron con Putin en el Kremlin el jueves estaban callados. "Los empresarios entienden muy bien las consecuencias. Pero quién está preguntando su opinión sobre esto".