Santander disputa a Iberdrola el segundo puesto de cotizada más valiosa del Ibex
La entidad financiera capitaliza más de 57.600 millones
El pódium de las principales cotizadas españolas por valor en Bolsa está a punto de sacudirse una vez más. Santander amenaza con quitarle el segundo puesto a Iberdrola. Con una capitalización de 57.606 millones, el banco que preside Ana Botín pisa los talones a la compañía que pilota José Ignacio Sánchez Galán (59.805 millones). Hace 13 meses, la foto era muy distinta. En plena segunda ola de la pandemia, la eléctrica española a punto estuvo de disputarle la primera plaza a Inditex, firma que, pese a retroceder un 11,15% en lo que va de año, continúa siendo la empresa más valiosa de la Bolsa (79.010 millones). En enero de 2021 Iberdrola capitalizaba más de 79.407 millones frente a los 83.277 del grupo textil y a cierta distancia de los más de 47.860 millones que ostentaba Santander.
Detrás de este baile de sillas, la rotación de carteras que impera en los últimos tres meses juega un papel protagonista. En un escenario de elevada volatilidad en el que los inversores han empezado a poner en precio una subida de tipos, el sector financiero resurge. Aunque el fin de la era de los tipos cero está lejos, los inversores han aprovechado los fuertes descuentos que acumulaban los bancos para incrementar su exposición. Esto unido a las expectativas de mejora de la economía y unos resultados que recuperan los niveles prepandemia han llevado a las entidades a anotarse sustanciales subidas en Bolsa. Solo en lo que va de año Santander repunta un 13%, ascenso que en los últimos 13 meses se amplía al 34%. Después de este buen comportamiento, los analistas de Credit Suisse aconsejan prudencia y mantienen la recomendación en neutral, frente al 59,4% de los expertos que aconsejan comprar acciones.
Mientras los bancos recuperan el brillo perdido, las utilities y renovables, que en los momentos más duros de la pandemia lograron resistir con mayor holgura las sacudidas, son las grandes perjudicadas. El aumento de las tasas y el consiguiente encarecimiento del coste de financiación es vista como la gran amenaza para la sostenibilidad de unos balances muy apalancados. Esto ayuda a explicar el pobre desempeño que viene registrando Iberdrola en los dos primeros meses del año, periodo en el que retrocede un 9,3%. Esta caída se suma al recorte del 7,61% de 2021 y contrasta con las ganancias del 32,72% registradas en el año de la pandemia.
Además del encarecimiento del coste de financiación, los rendimientos de la deuda entran en competencia directa con la rentabilidad por dividendo de las utilities. Al complejo panorama que acompaña a la normalización monetaria, Ángel Pérez Llamazares, analista de Renta 4, añade las dudas que existen acerca de los retornos de las inversiones ante la actual subida de las materias primas, los costes de transporte y los efectos de los cuellos de botella. Esta característica que es común al sector eléctrico europeo se suma la incertidumbre regulatoria que impera en España. Las medidas, posteriormente matizadas por el Gobierno, para abaratar el coste de la luz siguen pensando sobre el sector.
Los sectores con más peso
Aunque Santander e Iberdrola son las cotizadas que mejor ejemplifican la disparidad de comportamiento de cada uno de los sectores de los que forman parte, la evolución en Bolsa del resto de entidades y energéticas ha seguido el mismo esquema en los últimos meses. Las esperanzas de que una subida de los tipos se traduzca en unos mayores ingresos ha servido de catalizador para las subidas en Bolsa de la banca. Con las recientes revalorizaciones, el sector financiero del Ibex 35 ha pasado a capitalizar cerca de 132.000 millones, un 29,4% más que en enero de 2021. Por contra, Iberdrola junto al resto de firmas renovables, eléctricas y gasistas (Solaria, Endesa, Enagás, Red Eléctrica, Siemens Gamesa y Naturgy) se dejan 35.580 millones en Bolsa, hasta los 129.964 millones. El bancario vuelve a convertirse en el sector de la Bolsa española con más peso, una calificación que ostentó en los años dorados cuando el selectivo español coqueteaba con los 16.000 puntos.
Además de la política monetaria y la mejora del crecimiento, las dos grandes palancas para el negocio bancario, las cuestiones corporativas han jugado un papel destacado. Esto se deja sentir con más incidencia entre las energéticas que en la banca, un sector que pese a los esfuerzos acometidos en el pasado continúa estando en la diana de los procesos de consolidación para mejorar la eficiencia. El cambio en la cúpula directiva de Siemens Gamesa para poner fin a las pérdidas y el fracaso de la opa del fondo australiano IFM sobre Naturgy, junto al reciente anuncio de su escisión en dos empresas distintas, son dos buenos ejemplos que han tenido un reflejo inmediato en la cotización. Desde los máximos históricos registrados el pasado enero, la gasista corrige un 18,8%.
Inditex se ancla al liderazgo
Medalla de oro. El pasado noviembre las acciones de Inditex recuperaron los 32 euros por acción. Superar esta barrera fue suficiente para que su capitalización retornarse a los 100.000 millones. Aunque el grupo textil continúa siendo la empresa más valiosa del Ibex 35, la corrección sufrida en los últimos tres meses y medio le ha llevado a dejarse cerca de 21.600 millones en Bolsa. Con estas caídas, su valor se reduce a los 79.010 millones.
Cellnex. Las ampliaciones de capital acometidas en los últimos dos años para financiar las inversiones y las fuertes revalorizaciones sirvieron de impulso para que Cellnex se convirtiera el pasado agosto en el cuarto valor más valioso del Ibex. Hace seis meses, su capitalización superaba los 41.493 millones, muy lejos de los 26.032 millones actuales. Por encima de ella se sitúan BBVA (38.087 millones) y Amadeus (27.633 millones), dos firmas que se han visto impulsadas por el levantamiento de las restricciones y las expectativas de normalización monetaria.
Ponderación. A pesar del correctivo sufrido por Iberdrola, la eléctrica sigue siendo la firma con más peso. Su ponderación alcanza el 12,7%, frente al 12,3% de Santander y el 11,45% de Inditex.