Mecalux prepara su salida a Bolsa para abril por más de 2.000 millones
Goldman, BNP, Bank of America, Santander, BBVA, Caixa y Sabadell pilotarán la operación
Mecalux trabaja a pleno rendimiento para volver a cotizar en Bolsa en abril. El gestor de soluciones de almacenaje ya ha conformado un ejército de bancos de inversión con el objetivo de pilotar la venta en el mercado de un 30% de la firma, según indican fuentes financieras. Las valoraciones parten de los 2.000 millones de euros.
La familia Carrillo es el dueño del 90% de Mecalux tras haber adquirido en 2019 el 31% que estaba en manos de Corporación Financiera Alba y Cartera Industrial Rea. Por entonces pagó 155 millones, que financió con un préstamo que aportó tanto el fondo de deuda Tikehau Capital y un grupo de bancos liderado por CaixaBank, BBVA y Sabadell.
A cierre del ejercicio de 2020, según sus últimas cuentas anuales, Mecalux tenía una deuda con entidades de crédito por importe de 110 millones de euros, que se corresponde con ese préstamo que rubricó en 2019 para financiar la adquisición de acciones y después renegoció en 2020, extendiendo su vencimiento hasta 2026 y por la que paga un interés del 2,25% anual. En esa fecha la empresa emitió también 100 millones de euros en bonos. Estos títulos expirarán en 2032 y pagan un 2,6% anual.
Por el momento la compañía ha encargado a Goldman Sachs pilotar la operación. A su lado trabajarán BNP Paribas, Santander y Bank of America. En un segundo escalón están BBVA, CaixaBank y Sabadell.
Resultados
El objetivo de los fundadores es vender en Bolsa en torno al 30% del capital para cancelar la deuda de la compañía. Y aprovechar los buenos resultados de la firma, en pleno auge de la logística y el ecommerce, para embolsarse las plusvalías que atesora. La compra de las participaciones de Alba y Rea valoró la empresa en 2019 en unos 500 millones y ahora las primeras tasaciones de los bancos de inversión la valoran unas cuatro veces más cara, por 2.000 millones. La familia Zardoya –que ostenta el otro 10% y acaba de acordar la venta de las acciones que retenía en el fabricante vasco de ascensores a Otis en su opa– también podrá desprenderse de sus títulos.
Pero es que Mecalux volverá a la Bolsa con una historia que contar a los inversores bien distinta a la de la empresa a la que los March los Carrillo lanzaron una opa para salir del parquet en 2010. Lo que entonces era un mero fabricante de estanterías para almacenaje ahora presume de ser algo más: un líder tecnológico en logística. Además de la producción de estanterías metálicas, cuenta también con un negocio de software para almacenes y también se dedica a la automatización de estos.
Cuenta con presencia en más de 70 países y una red de 11 centros productivos ubicados en España, Polonia, EE UU, México, Brasil y Argentina. Destaca, por tanto, su marcado carácter internacional, donde el mercado español supone apenas un 20% de la facturación total por un 30% del resto de Europa, un 40% de los países NAFTA (EE UU, Canadá y México) y un 6% del países del Mercosur.
Según sus últimas cuentas anuales, la compañía obtuvo unos ingresos de 676 millones de euros en 2020, afectado por la eclosión del Covid-19. Los beneficios, por su parte, fueron de 62,8 millones de euros, mientras que el ebitda ascendió a los 93,6 millones.
Tras los pasos de Ibercaja
El mercado empieza a diseñar las posibles salidas a Bolsa para este 2021. En la lista está ya Ibercaja, que ya ha comunicado a la CNMV su intención de sacar a cotizar hasta el 42% del capital que ostenta sus accionistas, la Fundación Ibercaja, la Fundación Círculo de Burgos la Fundación Inmaculada de Aragón y la Fundación Caja Badajoz. Con una valoración de entre 1.500 y 2.000 millones, su objetivo es ser la primera firma en debutar en Bolsa este año, entre el 10 y el 20 de febrero. Más tarde llegará, además de Mecalux, Cirsa, que Blackstone quiere colocar en el mercado por unos 3.000 millones. Y también está el foco puesto sobre OPDE, que el año pasado tuvo que cancelar su estreno y está rediseñando la operación.