BBVA busca alianzas en seguros y pagos para captar 10 millones de clientes hasta 2024
Pretende, además, potenciar el negocio con pymes y consumo Cree que los negocios de de banca privada y de inversión tienen potencial para aumentar su peso en el grupo
BBVA se ha marcado como uno de sus grandes objetivos en su nuevo plan estratégico 2021-2024 captar 10 millones de nuevos clientes entre todos sus negocios y filiales. De ellos, 3,6 millones corresponden a España. Para lograr sus pretensiones la entidad que preside Carlos Torres pretende impulsar una serie de negocios que considera que aportan más valor, como son el negocio de pymes, de banca privada y de crossborder. En el caso de productos con más valor que espera potenciar son los seguros y pagos. Aunque, en España el crédito al consumo también está entre los productos a impulsar.
En varios de estos negocios, como en Seguros y en pagos o plataformas, BBVA busca nuevas alianzas que se sumen a las que ya tiene el banco, caso de Allianz en seguros de no vida, Sanitas en seguros de salud, o con Vitality en vida, por ejemplo.
“Más allá de nuestros propios canales, vemos las alianzas con terceros como una palanca importante para aumentar la adquisición de nuevos clientes en el futuro. Vemos sus plataformas como un lugar donde, a través de la integración perfecta de nuestros productos y servicios, realmente podemos adquirir y servir a los clientes donde están”, explicó el jueves David Puente, Global Head of Client Solutions.
El ejecutivo, que participó en el Investor Day de BBVA celebrado el día 18 y en el que el banco presentó su plan estratégico a cuatro años, recalcó que BBVA está poniendo “un enfoque significativo en la firma de acuerdos e invirtiendo en capacidades de open banking”.
El banco está adquiriendo a través de acuerdos con terceros un 37% más de clientes que hace dos años, y ya representa el 10% de los nuevos usuarios adquiridos digitalmente.
Arranca el lunes y a través de JP Morgan su recompra de acciones
El segmento de pymes está calificado por el banco de alto valor, y se plantea como uno de los mercados donde seguir creciendo y desarrollando servicios digitales que les permita atender las necesidades de este colectivo de pequeñas empresas, explica la entidad financiera.
Los ingresos captado de las pymes crecieron en BBVA un 7% y un 17% en clientes este año comparado con 2019.
El negocio de pagos se ha convertido en una de las principales palancas para crecer para bancos y fintech, y como es lógico, para BBVA también, según quedo patente en el Investor Day. En este segmento del negocio, el banco destacó la tarjeta Aqua. Desde el lanzamiento de esta tarjeta, nativa digital, el crecimiento en tarjetas de crédito se ha multiplicado por cuatro desde 2019.
También se destacó la plataforma de pagos para empresas Openpay. la startup mexicana adquirida por BBVA que está expandiendo a nuevos países latinoamericanos como Perú y Colombia, y ha permitido multiplicar por seis el negocio de BBVA en este segmento.
El grupo bancario también pretende potenciar el negocio de banca privada, uno de los segmentos de negocio en e que ahora quiere crecer todo el sector y en el que también se están produciendo varias operaciones corporativas, aunque no de gran envergadura.
La banca de inversión y corporativa aporta al grupo el 16% de sus ingresos, pero la entidad cree que tiene todavía un gran recorrido ara crecer, según expuso la cúpula de la firma ante analistas e inversores.
El objetivo final de estos planes es lograr mejorar la rentabilidad sobre fondos propios excluyendo intangibles (ROTE, por sus siglas en inglés) del grupo del 14%, frente al 11,7% de los primeros nueve meses del presente ejercicio. En cuanto al ratio de eficiencia (que mide la proporción de los costes sobre los ingresos), estima mejorar hasta el 42% en 2024, desde el 44,7% en el que se situaba a cierre de septiembre.
Al margen, el banco anunció a la CNMV que el próximo lunes, día 22, iniciará el primer tramo de su plan de recompra de acciones de 3.500 millones de euros con un primer tramo por un valor máximo de inversión de 1.500 millones y sin precio tope en la cotización.
Este primer tramo se extenderá hasta el 16 de febrero como mínimo o el 5 de abril de 2022 a más tardar, salvo que alcance antes sus objetivos de compra o concurra “alguna circunstancia” que aconseje o exija suspenderlo o concluirlo, según detalló el banco al supervisor bursátil. Esta operación forma parte del programa anunciado por el banco para adquirir acciones equivalentes hasta el 10% del capital o por un valor máximo de 3.500 millones.
Cuenta con permiso del Banco Central Europeo (BCE) para ejecutarlo en su integridad en el plazo de un año desde que se ponga en marcha el próximo lunes con el arranque ya del primer tramo.
Con su ejecución, la entidad busca aumentar la retribución al inversor y será adicional además a la mejora del payout desvelada el jueves. En concreto, el banco prevé repartir ahora entre un 40 y 50% del beneficio ordinario en pago de dividendos frente al 30-40% de payout vigente en la actualidad.
En el primer tramo de recompra de acciones para su posterior amortización se ha fijado como objetivo adquirir títulos por dicho valor máximo de 1.500 millones de euros, siempre que no superen las 637.770.016 acciones -equivalentes al 9,6% de su capital social-.
Las compras de acciones las realizará en la bolsa española, en el DXE Europe, Turquoise Europe y Aquis Exchange y de su ejecución se ocupará JP Morgan AG, que tomará sus decisiones en relación con el momento de realización de las compras de las acciones independientemente de BBVA.
El banco cierra este domingo 110 oficinas
Ajuste. BBVA cerrará este domingo otras 110 oficinas, completando así su plan de redimensión de la red en España, que supone bajar la persiana a un total de 480 oficinas bancarias. El banco está ejecutando el ERE que pactó con los representantes de los trabajadores el pasado mes de junio. El ajuste implica la salida de 2.935 empleados (2.177 de la red de oficinas y 758 de servicios centrales y estructuras intermedias) y va acompañado de un plan para cerrar 480 oficinas. El grueso de empleados de servicios centrales, estructuras intermedias y centro corporativo dejaron la entidad el pasado 31 de julio, mientras que los trabajadores de la red de oficinas están saliendo progresivamente mes a mes, en función de las oficinas que se van cerrando. BBVA clausuró 172 oficinas en julio, 90 en septiembre y 108 en octubre. El ajuste de plantilla y oficinas quedará casi resuelto en el mes de noviembre, con la clausura este domingo de las 110 sucursales pendientes, informaron las fuentes consultadas. Estos cierres irán acompañados dela salida de la mayoría de empleados de la red, cuyos contratos se extinguirán a finales del mes. Todavía se mantendrán en el banco algunos trabajadores de servicios centrales y estructuras intermedias por causas organizativas. El acuerdo firmado recoge que el plazo para que estas personas salgan y el ERE se dé por completado se extiende hasta el 31 de marzo de 2022.