John Tidd: “La subida del precio de la electricidad es música para mis oídos”
Asesor del fondo de inversión Hamco Global Value
John Tidd (Salt Lake City, Estados Unidos, 1963) lleva 33 años dedicado en cuerpo y alma al sector financiero. Tras estudiar en la prestigiosa Universidad de Columbia comenzó a trabajar para Citibank, en Nueva York, Londres y Madrid. En 1999 se trasladó a Uruguay, donde lanzó su propio hedge fund, cosechando rentabilidades medias anuales del 15% a lo largo de 20 años. Llegó a administrar un patrimonio de 120 millones de euros. Ahora, tras regresar a España, ha fundado la firma Hamco Financial, que asesora el fondo Hamco Global Value. El vehículo está gestionado por Andbank, pero el objetivo de Tidd es llegar a crear su propia gestora. En los últimos 12 meses, el vehículo se ha revalorizado un 94%.
- R. ¿Qué pasó con el fondo que gestionaba anteriormente?
- R. Cuando decidí volver a España en 2019 opté por cerrarlo y devolver el dinero a los inversores. La figura que entonces utilizaba era la de hedge fund y para empezar a asesorar un vehículo en España he preferido que fuera un fondo de inversión convencional, así que no podía utilizar los datos de rentabilidades previas.
- R. ¿La filosofía de gestión es la misma?
- R. Es exactamente la misma. Buscamos compañías pequeñas y medianas por todo el mundo. Pero fundamentalmente fuera de Estados Unidos y Europa, dos mercados con mucha competencia. Tampoco invertimos en China, porque las cuentas de las compañías no son muy fiables. Aplicamos una filosofía de inversión en valor, al buscar empresas que coticen a precios muy bajos y que nos puedan aportar una buena rentabilidad. Nos gusta comprar siempre con fuertes descuentos respecto al precio normal.
"El gas en Europa era cinco veces más caro que en Canadá. Con el transporte de gas licuado los precios se homogenizarán"
- R. ¿Qué tipo de empresas prefiere?
- R. Nos gustan compañías que están poco endeudadas y que tienen datos de retornos internos de su capital atractivos, del 12% al 15%.
- R. ¿Dónde invierten ahora?
- R. Las principales posiciones las tenemos en compañías especializadas en la extracción de gas natural en Canada, como Peyto, que llegó a cotizar a 30 dólares canadienses desde un precio de solo 1 dólar; también en las que ofrecen servicios de perforación para el sector petrolero, como Ensign Energy Services. O firmas especializadas en el transporte del gas natural.
- R. ¿Cómo influye en su cartera la subida de los precios de la electricidad?
- R. Para mí, es música para mis oídos. La rentabilidad del fondo tiene mucho que ver con la subida del precio del gas en Canadá en 2021. Con la subida del precio del gas, las empresas van a ganar mucho dinero. Durante la pandemia, muchas compañías especializadas en las perforaciones para encontrar gas, o las que lo transportaban, se habían desplomado más de un 50%.
- R. ¿Qué ineficiencias tiene ese mercado?
- R. Durante la crisis del Covid se desplomó el precio del petróleo, pero subió el del gas. Vimos que el precio del gas era cinco veces más caro en Canadá que en Europa. Ahora, con el transporte de gas licuado se está homogeneizando el precio del gas mundial. Las empresas canadienses podrán empezar a vender mucho fuera.
- R. ¿En qué geografías está más presente?
- R. Es algo que surge de forma espontánea, no por un análisis macroeconómico global. Depende del momento. Cuando empecé a invertir en los 90, me fue muy bien apostando por empresas constructoras españolas que se beneficiaban del acceso a la Comunidad Europea. Luego invertí en Indonesia, cuando sufrió por la crisis financiera asiática. También hemos invertido en momentos difíciles en Argentina, o en Grecia. Es cuando se encuentran las mejores oportunidades.
- R. ¿Cómo llega a conocer a fondo las empresas?
- R. Como son relativamente pequeñas, es fácil hablar directamente con los máximos directivos. Salvo en Japón y Corea del Sur, en casi todos los países los gestores dominan el inglés. Les hacemos preguntas muy concretas para comprobar que creen realmente en sus planes estratégicos.
- R. ¿Por qué decidió tener este enfoque tan global?
- R. ¿Alguien se imagina ir por el supermercado y no entrar a comprar en la mitad de los pasillos? Para mí no es razonable.
- R. También tiene una fuerte exposición a Corea del Sur...
- R. Sí, es un país con muchas empresas pequeñas y medianas que cotizan a precios de derribo. El año pasado subió mucho su Bolsa, pero sigue habiendo compañías cotizando a precios muy atractivos. Seguimos encontrando muchas oportunidades. El mercado ha estado muy deprimido durante mucho tiempo. Corea del Sur ya no es un país emergente, sino un país totalmente desarrollado. Invertimos en compañías industriales, de componente, en negocios financieros, seguros... Vamos a incorporar más valores.
- R. ¿Dónde más está encontrando valor?
- R. Tenemos varias posiciones en Argentina y Turquía, dos países que hoy por hoy le dan mucho miedo al inversor. Pero vemos algunas oportunidades muy buenas, como por ejemplo, las filiales de BBVA en ambos países, que cotizan a precios ridículos. Tenemos también empresas de telecomunicaciones en Turquía. También hemos invertido en Coca Cola Turquía. En Argentina tenemos el 10% de la cartera, y en Turquía el 8%. Cotizan a precios baratísimos.