Santander extiende a 3.500 prejubilados de Popular poder cobrar de una sola vez su pensión
El banco amplía el proceso iniciado en 2020 que entonces solo afectaba a sus exempleados, y que más del 70% de este colectivo aceptó la oferta
Banco Santander ha ofrecido a 3.496 empleados del ya desaparecido Banco Popular beneficiarios del plan de pensiones para empleados de Santander, la sustitución de las rentas vitalicias que vienen percibiendo por un capital que se integrará en su plan de pensiones como un fondo de capitalización a su nombre. La adhesión a esta oferta del banco, con la que se extiende el proceso iniciado en 2020, se hace en el marco de la negociación colectiva y tiene el próximo viernes día 23 de julio, inclusive, como fecha límite para su adhesión.
El beneficiario que opte por adherirse, podrá disponer del fondo de capitalización a su conveniencia, optando por cualquiera de las formas de cobro previstas en el plan de pensiones (capital, renta financiera sin garantía, formas mixtas que combinan capital y renta o percepciones sin periodicidad regular) permitiendo adaptar el cobro de sus derechos a sus necesidades actuales, explican en el banco.
En el supuesto que se produjera el fallecimiento del titular de renta vitalicia, una vez hubiera optado por el fondo de capitalización, serán beneficiarios de las cantidades pendientes de cobro aquellos expresamente designados por el fallecido. La oferta es voluntaria por lo que se puede decidir mantener la percepción de la renta vitalicia como hasta ahora o transformar dicha renta vitalicia en el fondo de capitalización.
Este modelo capitalización de la pensión de los empleados de Banco Santander ya se ofreció por primer vez en diciembre de 2019, tras alcanzar la entidad un acuerdo con la totalidad de las representaciones sindicales del grupo. Entonces se ofreció al personal pasivo procedente solo de dicha entidad con compromisos pensionables provisionados en el fondo interno en el balance del banco, la posibilidad de elegir libremente la sustitución de la percepción de renta vitalicia por el abono de un pago único o fraccionado en forma de capital.
Entonces, más de un 70% del colectivo formado por unos 20.000 empleados aceptó la oferta, con la que el banco daba a todo el personal pasivo la oportunidad de elegir si quería cobrar sus pensiones de una sola vez (pago único o diferido en un corto periodo de tiempo) o mantener una renta vitalicia.
Cada uno de esos antiguos trabajadores reciben por tanto 12 mensualidades de la entidad, como un complemento a la pensión y según los ingresos que negociaron en su día, antes de la salida de la plantilla del grupo.