Las aerolíneas crean un foro, al que invitan a Gobierno y energéticas, para abordar su reto climático
La asamblea de la Asociación de Líneas Aéreas demanda medidas que incentiven la inversión en nuevas tecnologías
El sector de la aviación, representado por la Asociación de Líneas Aéreas, quiere tener voz, e incluso voto, en el desafío que implica la descarbonización de su actividad. De la asamblea general celebrada esta mañana por el colectivo ha salido la propuesta de creación de un comité para la sostenibilidad de la aviación, cuyo objetivo será buscar una recuperación sostenible del sector tras la crisis del coronavirus.
Este foro, que tendría carácter consultivo, está inspirado en el Jet Zero Council británico, en el que figuran dos secretarios de Estado y cuya primera reunión fue presidida por el primer ministro Boris Johnson. ALA ha abierto el comité a representantes de los distintos ministerios implicados, así como a entidades relacionadas con el transporte aéreo (Aena, Aesa, Enaire, Ejército del Aire, energéticas, etcétera). Se trata de participar en la hoja de ruta que conduzca hasta la meta de emisiones neutras en carbono en 2050. Más allá de la presente crisis, las compañías aéreas son conscientes de que se juegan su futuro. Quieren dejar de ser vistas como parte del problema para pasar a ser la solución.
Esta iniciativa público-privada vuelve a dar velocidad de crucero al trabajo del sector por reducir su aportación, de apróximadamente el 2,5%, a las emisiones de gases de efecto invernadero. Se trata de debatir las soluciones y abrir espacios de I+D e inversión en lugar de sufrir prohibiciones y cargas fiscales que, a juicio de las aerolíneas, tendrían un efecto adverso en la movilidad, en sus inversiones y en la economía.
Durante el espacio de debate que precedió a la asamblea, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, habló de la necesidad inaplazable de sustituir el fuél por los combustibles alternativos y tendió la mano a iniciativas público-privadas. La directora de Innovación de Aena, Amparo Brea, anticipó que el gestor aeroportuario bonificará en un futuro en sus tarifas el uso de los llamados SAF (biocombustibles) y otras tecnologías bajas en CO2.
El problema, según manifestaron representantes de la industria como el presidente de Iberia, Javier Sánchez-Prieto, o el de CEO de Volotea, Carlos Muñoz, es la escasa disponibilidad de los nuevos combustibles y su precio. “Cuando haya aviones a hidrógeno los compraremos, al igual que esperamos combustibles alternativos a precios razonables, pero mientras no debería atacarse a la actividad aérea, sin alternativas en rutas largas”, reclamó Sánchez-Prieto, quien subrayó que la aviación ha sido capaz de rebajar a la mitad sus emisiones en tres décadas.
Secundó esta opinión el vicepresidente de Iata, Rafael Schvartzman, al tiempo que urgió la puesta en marcha del cielo único europeo: “Para esto sí hay tecnología”.
Escuchaban entre los asistentes el director general de Aena, Javier Marín; el CEO de Air Europa, Valentín Lago; el fundador y presidente de Air Nostrum, Carlos Bertomeu; el primer ejecutivo de Iberia Express, Carlos Gómez, o los responsables de Binter e Iberojet, Rodolfo Núñez y Antonio Mota, respectivamente. También Javier Gándará, director general de Easyjet para el sur de Europa y presidente de ALA, reelegido esta mañana por dos años más.
Recuperación a la vista
El sector aéreo espera ver la recuparación de un nivel de actividad comparable al de 2019 a la vuelta de dos a tres años. El secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, afirma que “este verano ya no va a ser igual que el de 2020, pese a que aún resta ver cómo va a abrirse el mercado británico. Nos hemos dotado de herramientas para generar certidumbre al viajero y garantías de que no habrá pasos atrás”.
Valdés espera que España pueda contar con el turista británico, pero “podría depender más de su situación epidemiológica que de la nuestra”. Reino Unido revisará su clasificación de destinos, en función de las condiciones sanitarias, el próximo día 28. Más a allá de la urgencia de este verano, ha expuesto Valdés, España debe trabajar para atraer al viajero de largo radio, lo que pasa por mirar hacia Asia.
Para el director ejecutivo de la Organización Mundial del Turismo, Manuel Butler, este país va a seguir siendo referencia tras la pandemia. Su posición es de optimismo respecto a la reactivación del destino y la aportación del certificado verde digital para permitir, a partir del 1 de julio, la movilidad en una primera fase dentro de Europa.
Durante su intervención en una de las mesas, el CEO de Volotea, Carlos Muñoz, se refirió a la necesidad de que se armonicen las políticas de movilidad en el espacio de la UE, como se ha hecho en Estados Unidos, y que los gestores aeroportuarios ayuden a la recuperación con medidas de contención tarifaria. Ya en el cierre de la asamblea, el secretario de Estado de Infraestructuras, Pedro Saura, aseguró que no es intención del Gobierno imponer nuevas cargas a las compañías aéreas.
Un mensaje que, a juicio de algunos de los directivos presentes, abre la puerta a rebajas en la posición de partida de Aena sobre las tarifas para el quinquenio regulado 2022-2026. La propuesta es de subida de un 0,52% en el Ingreso Máximo Anual por Pasajero (IMAP) entre 2022 y 2025, para pasar a un alza del 3,29% en 2026. El Consejo de Ministros tendrá la última palabra el próximo mes de septiembre.