Cimic (ACS) gana un 6,9% menos, pero eleva márgenes y mantiene previsiones
El beneficio neto es de 100,2 millones de dólares australianos, unos 64 millones de euros
El brazo constructor de ACS en Australia, Cimic, ha saldado el primer trimestre con un beneficio neto de 100,2 millones de dólares australianos (64 millones de euros), lo que representa un descenso del 6,9% respecto a marzo de 2020. La empresa que dirige Juan Santamaría se ha referido a los efectos de la pandemia en la actividad para explicar este retroceso.
Las ventas se contraen un 1,2%, hasta los 3.388 millones de dólares australianos (unos 2.172 millones de euros), mientras que el ebitda mejora un 8,4%, subiendo a 217,4 millones de dólares australianos (140 millones de euros). El margen mejora, por tanto, del 8,5% al 10%.
La cartera de contratos, de 30.200 millones de dólares australianos (1.200 millones por encima de la cifra de marzo de 2020), se ha visto nutrida de nuevas adjudicaciones por 3.500 millones en moneda local en este inicio de ejercicio.
La filial de ACS mantiene previsiones para lo que resta de 2021. Esto es culminar el ejercicio con un resultado neto de 400 a 430 millones de dólares australianos. Para ello, el CEO Santamaría cree que los planes de estímulo de Australia jugarán a favor del sector, al tiempo que la empresa trata de maximizar el control de riesgos en la contratación tras duras provisiones por proyectos fallidos en 2019 y 2020.
El colchón de liquidez actual es de 3.700 millones de dólares australianos tras obtener financiación por 1.400 millones.
La firma tiene localizadas oportunidades para concursar por 520.000 millones de dólares australianos, de los que proyectos por 130.000 millones han sido licitados bajo la modalidad de colaboración público-privada.