Plus Ultra se ve estratégica por competir con Iberia y formar parte del transporte y turismo
Defiende sus cifras y ratios de solvencia previos al rescate de la SEPI
La aerolínea rescatada por el Estado Plus Ultra, con el acceso a un préstamo de 53 millones del fondo de apoyo a la solvencia de empresas estratégicas, ha salido a defender tanto la operación supervisada por la SEPI como su solvencia y papel estratégico en la conectividad de España. Algunos argumentos resultan menos sólidos que otros.
La compañía, que cuenta con certificado de Operador Aéreo y licencia de explotación otorgada por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), reitera que tributa en España y emplea a 354 personas de forma directa, ofreciendo actividad a otros 2.500 puestos indirectos. Y recuerda que la AESA solo autoriza la operación de aquellas compañías que hayan demostrado que son españolas, con la mayor parte del capital y más de la mitad de los miembros del consejo de administración españoles o comunitarios. Hasta aquí la demostración del ADN español.
A renglón seguido, Plus Ultra se siente estratégica para el país por formar parte “del sector Transporte y Turismo, catalogado como estratégico por el Gobierno de España y el mercado en general”, afirma a través de un comunicado. Y abunda en que su actividad garantiza “el buen funcionamiento del mercado español en lo que respecta a la no alteración de la competencia”. Un extremo que ha sido puesto en duda ante la baja cuota de mercado incluso antes de la crisis sanitaria.
En caso de desaparecer por causa del derrumbe del tráfico motivado por la pandemia, la firma argumenta que “se establecería un monopolio en el mercado ya que muchas de sus rutas serían sólo operadas por Iberia-Air Europa en caso de cerrarse la operación de fusión en marcha”. Desde el punto de vista de esta pequeña aerolínea, actualmente en el ojo del huracán, “esto perjudicaría gravemente a miles de usuarios que no tendrían cubierta su demanda a un precio asequible y con un adecuado número de frecuencias”.
Plus Ultra también defiende que España es uno de los países del entorno con menos aerolíneas con licencia de Tipo A, para el transporte de pasajeros con aviones de gran capacidad. Un permiso en manos de esta compañía. “Contar con aerolíneas con este tipo de licencia es estratégico para avanzar en uno de los objetivos clave del Estado español: posicionar el Aeropuerto Adolfo Suárez- Madrid Barajas como uno de los principales Hubs de Europa, en competencia con países como Alemania, Francia o Reino Unido”, explica la empresa. En el argumentario remitido a los medios también dice tener planes para conectar múltiples destinos de Latinoamérica con destinos de Alemania e Italia a través de Barajas.
Proyecto en maduración
Durante el ejercicio 2019, Plus Ultra contabilizó más de 180.000 pasajeros a los diferentes destinos en los que opera y tenía en previsión alcanzar los 250.000 pasajeros en 2020. La empresa dice tener, de media, más de un 21% de cuota de mercado en las rutas que opera.
Ya desde el punto de vista económico, el ebitda de 2019 fue positivo, tres años después del inicio de operaciones, y el objetivo era alcanzar beneficios operativos en 2020 pese a que “la mayoría de las compañías aéreas de nueva creación tardan entre tres y cinco años en ser rentables”.
De levantarse las restricciones al tráfico durante el verano, Plus Ultra prevé recuperar mucha de su actividad, con “cinco rutas con dos o más frecuencias semanales de Madrid a Lima, Caracas, Quito y Guayaquil, así como de Tenerife a Caracas, siendo este el único servicio Transatlántico desde las islas”. También espera añadir “próximamente” rutas desde Madrid a Bogotá, Cali, Cartagena, La Habana y Santo Domingo, para lo que operará una pequeña flota de cuatro aviones Airbus.
Criterios de solvencia
La solicitud de ayuda a la SEPI se produjo en septiembre por las pérdidas generadas por la crisis sanitaria. “La aerolínea cumplía con creces los criterios de solvencia definidos por la propia SEPI y los demás actores financieros involucrados en el proceso de concesión de las ayudas”, asevera. Y añade en su comunicado que los cálculos se hicieron utilizando como periodo de referencia el último trimestre de 2019, “durante el cual se calculó una ratio de patrimonio cercana a un 70%, teniendo en cuenta tanto la financiación externa como el capital de los asociados”. Los requisitos de la SEPI exigen un mínimo de un 50%.
Otro punto que recalca la aerolínea es que el préstamo al que ha accedido debe ser devuelto en un plazo de siete años, no es a fondo perdido, y se empleará “para garantizar la continuidad de la compañía, para preservar la competencia evitando un monopolio en varias rutas, beneficiar a los miles de usuarios que usan esas rutas, y para ayudar a mantener los puestos de trabajo directos e indirectos de más de 2.500 de familias españolas generados por la aerolínea”.