¿Y si al final los nuevos iPhone 13 se retrasan y no llegan en septiembre? Esta sería la razón
Apple se enfrenta a un problema que viene golpeando el mercado.
Hace justo un año, cuando apenas llevábamos 15 días de confinamiento duro en el mundo tras la llegada de la pandemia de coronavirus, muchos analistas empezaron a avisar de que el cierre de las fábricas en chinas iba a impedir a Apple lanzar sus teléfonos móviles en las fechas acostumbradas y, de septiembre, ese momento pasaría a octubre o noviembre.
Y así ocurrió. Los iPhone 12 han sido los primeros en muchos años que han acabado aterrizando en las tiendas más tarde de lo normal, algo que nadie esperaba que ocurriera en 2021 con los iPhone 13 (o cómo se terminen llamando). Ahora la amenaza es otra y seguro que habéis oído hablar de ella, indirectamente, por culpa de la escasez de consolas de nueva generación (PS5 y Xbox Series X), o de los propios componentes para ordenadores.
Los analistas ven un nuevo retraso
Así las cosas, esa escasez de chips está provocando un efecto dominó que está haciendo caer las fichas del tablero de forma progresiva. Aunque ahora mismo está afectando a los fabricantes de ordenadores y consolas, también lo va a hacer con aquellos que necesitan componentes parecidos para smartphones y otros dispositivos móviles. Lo que toca a Apple y sus iPhone 13 de lleno que, supuestamente, iban a estar disponibles en las tiendas, sin problemas, en septiembre de este 2021.
Esos problemas de escasez alrededor de los chips está afectando a empresas como Foxconn que, a través de su presidente, Young Llu, ya han avisado de que no están seguros de cuánto tiempo más les afectará esta falta de suministros y de qué forma impactará en las previsiones marcadas con todas las empresas para las que trabajan. Es más, no fió el final de esta crisis para los próximos meses y avanzó que podría extenderse hasta "el segundo trimestre del año que viene". Esto es, junio de 2022.
Eso impactaría completamente en los planes de lanzamiento de los nuevos iPhone 13, que verían su producción limitada en los que suelen ser los meses decisivos de iniciar su fabricación. Es decir, para julio de este año. De ocurrir así, los analistas ya prevén un nuevo retraso en el lanzamiento de los nuevos smartphones, apenas unas semanas después de haber anunciado justo lo contrario, que los planes de los de Tim Cook pasaban por volver a la normalidad y a tener, otra vez, su nueva gama a la venta en la última semana del mes de septiembre.