Noticia patrocinada
Andújar (Santander): “La mujer es más prudente y se focaliza en el largo plazo”
Prefiere bienes inmuebles, seguros de ahorro y fondos y planes más conservadores que los hombres, asegura la directiva
María Ruiz Andújar, directora de Desarrollo de Negocio y miembro del Comité de Dirección de Santander España, desvela los cambios que ha experimentado la gestión de activos con la entrada de la mujer, como profesional e inversora.
- R. En los últimos quince años, ¿ha cambiado la mujer como inversora?
- R. El mundo de las inversiones tradicionalmente ha sido masculino, pero en los últimos años las diferencias se han ido reduciendo, con la incorporación de la mujer a puestos directivos y empresariales, incrementando su capacidad de ahorro. En la actualidad, aproximadamente un 46% de los inversores son mujeres.
- R. ¿Cuáles son sus vehículos de inversión favoritos?
- R. En general, la mujer es más conservadora y tiende a pensar sus decisiones de inversión más detenidamente, focalizándose en el largo plazo, buscando inversiones más prudentes, como los bienes inmuebles, los seguros de ahorro, y los fondos y planes más conservadores.
Los hombres suelen tender a tomar decisiones más arriesgadas y entrar y salir más veces del mercado, prefiriendo la inversión en acciones y fondos y planes más agresivos. Para las mujeres es también más importante que para los hombres que el producto garantice una pérdida mínima, la obtención de rentas periódicas y las deducciones fiscales.
- R. ¿Apuesta más por la inversión responsable?
- R. En la apuesta por la inversión responsable, más que diferencias de género, vemos grandes diferencias a nivel generacional. La inversión responsable es una tendencia en claro crecimiento y las nuevas generaciones están mucho más sensibilizadas hacia este tipo de inversiones, siendo uno de los atributos que exigen en muchos casos a los productos a la hora de invertir, pero no hay grandes diferencias entre hombres y mujeres.
- R. ¿Cómo prepara su jubilación?
- R. El mayor foco de la mujer en el largo plazo hace que le interesen más los productos enfocados a la previsión y jubilación, especialmente los planes de pensiones, en los que utilizan más las aportaciones periódicas que los hombres.