Iberdrola, la gran apuesta verde del fondo de las pensiones de Noruega
Es su primera posición en la cartera de compañías con bajas emisiones
El fondo de las pensiones de Noruega es el mayor fondo soberano del planeta, con un volumen de activos que ya está cerca del 1,1 billones de euros (casi el PIB de España). Aunque este vehículo de inversión se nutre de los ingresos del petróleo y del gas, tiene un firme compromiso para invertir en compañías que combatan el cambio climático, y una de sus grandes apuestas es la eléctrica española Iberdrola.
El banco central de Noruega, a través de su división Norges Bank Investment Management, es el encargado de invertir el dinero del fondo. NBIM ha presentado hoy el balance de inversión de 2020 y también el informe de responsabilidad social corporativa. En este último se detalla la cartera con las empresas en las que invierte que tienen un mayor compromiso con reducir las emisiones de carbono a la atmósfera y con las energías alternativas. La primera posición de esa lista de acciones es Iberdrola, con un peso del 6,8% en esta cartera. Por delante de la portuguesa EDP, la francesa Engie o la italiana Enel.
En esta lista también está el fabricante de camiones eléctricos Nikola y la eléctrica norteamericana NextEra Energy.
La inversión del fondo soberano de Noruega en Iberdrola vale en la actualidad 2.500 millones de dólares y se corresponde con el 3,4% del capital de la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán.
Fuerte inversión en bonos españoles
A diferencia de lo que ocurre con la Bolsa, el fondo noruego de las pensiones sí que tiene una clara predilección por los bonos emitidos por el Tesoro español. De acuerdo con su último informe, correspondiente al cierre de 2020, la deuda pública española era la 6ª con mayor peso en la cartera de renta fija del fondo soberano. La inversión de 5.000 millones de euros. Solo tiene una mayor inversión en deuda soberana de EE UU, Japón, Alemania, Reino Unido y Francia.
Norges Bank también invierte en bonos emitidos por compañías españolas, como Banco Santander, CaixaBank, Bankia, o la propia Iberdrola. También tiene posiciones en deuda emitida por organismo públicos como Adif, el Instituto de Crédito Oficial o la Comunidad de Madrid.
Con todo, Norges Bank no es el máximo accionista de Iberdrola. Tiene por delante al fondo soberano de Qatar con el 8,7% del capital, y a la gestora estadounidense BlackRock, con el 5,25%.
Iberdrola ha tenido una evolución bursátil meteórica en 2020. Empezó el año en 9 euros por acción y un año después valían 12 euros (+33%). Durante el año de la pandemia se convirtieron en un valor muy apreciado por su vocación 'verde' y por la fiabilidad de sus resultados. En los dos últimos meses han corregido, perdiendo un 20% de su valor hasta acercarse a los 10 euros.
Otras posiciones
Pese a esta fuerte apuesta por Iberdrola, la inversión del fondo noruego del petróleo en España es relativamente baja, cuando se compara con otros mercados. En Bolsa, las acciones españolas ocupan la posición número 12, por detrás de Estados Unidos, Japón, Reino Unido, China, Francia, Suiza, Alemania, Taiwan, Países Bajos, Australia y Suecia.
Además de Iberdrola, NBIM también tiene una importante inversión en BBVA (4,3% del capital), en Banco Santander (2%), Inditex (1%), Cellnex (2,99%), Amadeus (2,2%), CaixaBank (3,87%) y Telefónica (2,03%)... en total, más de 11.000 millones de euros invertidos en cotizadas españolas, pero que solo representan el 1,5% del total de inversión en Bolsa del gigante noruego.
Sus mayores inversiones en renta variable son los gigantes tecnológicos de Estados Unidos: Apple, Micorsoft, Amazon, Facebook y Alphabet (matriz de Google). También tiene fuertes posiciones en las suizas Nestlé y Roche, en la china Alibaba y en la taiwanesa TSM.