Santander vincula su banca de inversión británica a España
Se trata de un cambio societario en aplicación de la regulación Ring Fence
El Banco Santander ha reestructurado sus negocios en el Reino Unido. Como consecuencia de la ley Ring Fence, la nueva normativa bancaria del país británico, la entidad ha decidido hacer depender su negocio de banca de inversión en el país directamente de Banco Santander S.A. y dejar como único activo de Santander UK al negocio de banca minorita en el país. El movimiento se enmarca también en la salida del Reino Unido de la Unión Europea, cuyos efectos son plenos desde el pasado 1 de enero de 2021.
"En enero de 2021, anunciamos a los clientes planes para simplificar la estructura operativa del negocio de Santander Corporate & Investment Banking (Santander CIB) en Reino Unido. El traslado del negocio y las funciones de Santander CIB de Santander UK a la London Branch de Banco Santander, S.A. permitirá a los clientes de Santander CIB beneficiarse de las capacidades globales de Banco Santander y seguir progresando", señala un portavoz del banco.
En esencia, se trata de un movimiento societario de los 3.200 millones en activos que aglutina la filial Santander Corporate & Investment Banking UK. A partir de ahora, dependerán de la London Branch (la sucursal del banco español) con la que cuenta en la City la matriz del banco domiciliada en España, Banco Santander S.A.
La normativa Ring Fence, en vigor desde 2019, ya obligó a Santander a separar sus negocios de banca minorista y banca de inversión en Reino Unido. El movimiento que hace ahora tiene como objetivo mejorar el servicio a los clientes y evitar duplicidades.
Esto supone que, a partir de ahora, todos los negocios de banca de inversión de la entidad pasen a estar respaldados por euros y a caer bajo la supervisión de la UE. Esto supondrá, además una reducción de costes y aligeramiento de la estructura.
La aplicación de esta norma, así como los efectos del Brexit, ya supuso que el banco reconociese en 2019 un deterioro de 1.500 millones en el fondo de comercio de su filial británica. Según explicaba entonces el banco, esta norma provoca que la sucursal del banco en Londres vea aumentar sus activos en 40.000 millones de euros (de los que 25.000 millones son de un traspaso inicial de activos desde Santander UK). También prevé un aumento de costes al duplicarse algunas funciones, lo que disminuirá la capacidad de generar beneficios de su filial en el país británico.
La filial de Santander en Reino Unido obtuvo en 2020 un beneficio neto de 438 millones de libras (494 millones de euros), un 38% menos que en el año anterior.
Además, en noviembre la entidad que preside Ana Botín acordó relevar a su presidente en la filial en Reino Unido y nombrar a William Vereker. Sustituyó en el cargo a Shriti Vadera.