El fabricante de sandalias Birkenstock negocia su venta a CVC por 4.000 millones
El capital riesgo eleva su apuesta por las marcas de moda
Birkenstock, la compañía alemana fabricante de las conocidas sandalias, está negociando la venta de la empresa al fondo de capital riesgo CVC, según publican Bloomberg y Financial Times, citando fuentes cercanas a la operación. La marca de calzado, con casi 250 años de edad, mantiene conversaciones avanzadas con la gestora en una operación que podría alcanzar los 4.000 millones de euros, incluyendo la deuda.
Mientras que Birkenstock lanzó sus sandalias, icónicas para hippies y pijos por igual, en la década de 1960, las raíces de la marca se remontan a 1774, cuando Johann Adam Birkenstock trabajaba como zapatero en el estado alemán de Hesse. CVC está orientando sus inversiones a marcas de alto perfil y asociadas a una historia. Así, ya compró la relojera suiza Breitling en 2017, marca conocida por relojes con temática de aviación usados por el actor John Travolta. También en Alemania, ha adquirido la cadena de belleza Douglas, que cagraba con un exceso de deuda en medio de las restricciones por la pandemia.
Permira, ya propietaria de las también icónicas botas Dr Martens y de la firma de ropa Golden Goose, también se habría interesado por la operación, según Financial Times. De acuerdo con este diario, Birkenstock encargó la operación a Goldman Sachs.
Las resistentes sandalias Birkenstock ganaron popularidad desde que en 1966 una estadounidense llamada Margot Fraser las descubriera en unas vacaciones en Alemania y comenzara la a importar el producto. Popular entre bohemios y vanguardistas, las sandalias vivieron su gran momento en en la década de 1990 y los años 2000 de la mano de celebridades como Kate Moss y Heidi Klum.
Desde 2013, Birkenstock ha sido dirigida por el los co-CEOs Markus Bensberg y Oliver Reichert. La compañía vende sus productos, que también incluyen cinturones, bolsas y camas, en 90 países. Birkenstock vendió 23,8 millones de pares de zapatos en su último año fiscal, con un aumento de ventas del 11% hasta 721,5 millones de euros. El resultado neto aumentó un 40% hasta 129 millones de euros