El Gobierno ha desplegado a 62.000 personas para luchar contra los efectos de Filomena
Más de 62.000 personas han trabajado en el despliegue "sin precedentes" que el Gobierno puso en marcha hace diez días para hacer frente a la gran nevada que dejó la borrasca 'Filomena' en muchas zonas del país y la posterior ola de frío, según destaca en un comunicado Presidencia del Gobierno.
"El Estado ha desplegado todos los recursos humanos y materiales a su disposición para asegurar la integridad y salud de los ciudadanos, así como para garantizar el abastecimiento y la movilidad de los servicios esenciales, inmediatamente después de que la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) emitiera el primer aviso, el 5 de enero, sobre el temporal de nieve producido por la borrasca 'Filomena' y la posterior ola de frío", indica Presidencia.
En el dispositivo han trabajado, por parte del Ministerio del Interior, unos 48.000 efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, principalmente de la Guardia Civil, que han trabajado "sin descanso" desde el 8 de enero en el auxilio de personas, el aseguramiento de los servicios y bienes esenciales o la asistencia a los servicios de emergencia.
Asimismo, la Dirección General de Tráfico (DGT), además de los 1.600 de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (ATGC), movilizó a 685 operarios de los centros de gestión de tráfico, cuyo trabajo está resultando "vital" para prevenir incidentes importantes en las carreteras. Estos centros de gestión han llegado a embolsar 11.311 camiones en 127 áreas específicas. Desde la DGT también se ha coordinado la provisión de víveres y mantas a los conductores, así como los trabajos de retirada de los vehículos abandonados.
Por parte del Ministerio de Defensa se desplegaron por el territorio nacional más de 1.500 efectivos, especialmente militares de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y del Ejército de Tierra, así como 450 medios y vehículos, para realizar labores de apertura de accesos a centros hospitalarios y de salud, centros logísticos e infraestructuras esenciales, restablecimiento de la movilidad o traslado de pacientes de diversos hospitales.
La labor de la UME al principio de la nevada fue la de rescatar personas que se habían quedado atrapadas en vehículos y, más tarde, se procedió a dividir la ciudad de Madrid en seis sectores, correspondientes a los 23 hospitales más importantes que hay en la ciudad. En este sentido, la UME estableció como prioridad, con el apoyo del Ejército de Tierra y de la maquinaria necesaria, que las personas pudiesen llegar a los centros hospitalarios.
Otras provincias que cuentan con el apoyo de las Fuerzas Armadas son Toledo y Guadalajara. Contingentes del Ejército de Tierra ayudan en la retirada de las placas de hielo para recuperar la viabilidad y la normalidad. Esta tarde está prevista la llegada de maquinaria y personal de la Brigada Aragón para reforzar los trabajos en Guadalajara y en Molina de Aragón.
Por parte del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se activaron 1.300 máquinas quitanieves y 3.000 operarios para trabajar en las carreteras de todo el país, así como para la limpieza de las calles de Madrid capital y otros municipios de esta comunidad con el fin de habilitar los accesos a hospitales, residencias, polígonos industriales y centros logísticos. También se activaron 7.000 trabajadores en el ámbito de Renfe y ADIF y 1.500 en AENA y ENAIRE.
También fueron movilizados 600 efectivos de las Brigadas de Labores Preventivas dependientes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, así como otros efectivos de Protección Civil y de los distintos servicios de emergencia.
Así, este Ministerio ha movilizado a 213 efectivos de cinco Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales que desde el viernes 15 de enero trabajan en la limpieza de la ciudad de Madrid, en respuesta a la petición realizada por el Ayuntamiento de Madrid para liberar el paso y permitir la operatividad de los 258 colegios de la capital, una tarea en la que trabajan en coordinación con un dispositivo de Tragsa, encargado por el Ayuntamiento de Madrid, formado por 100 efectivos. También han actuado en la limpieza y vuelta a la normalidad en municipios de Cuenca, Toledo, Ávila, León, Soria y Zaragoza.
Red ferroviaria
Por otro lado, Presidencia informa de que el servicio de la red ferroviaria se encuentra restablecido en gran parte de las líneas, aunque todavía pueden producirse retrasos como consecuencia de la congelación de algunos elementos. Desde ayer, todas las capitales de provincia con conexión ferroviaria habitual con Madrid vuelven a disponer de ella.
También, entre el 7 y el 14 de enero, se ha retirado nieve en 105.000 kilómetros de carreteras y se han utilizado 246.000 kilómetros de tratamientos preventivos con fundentes. Se han esparcido alrededor de 89.000 toneladas de sal, lo que supone casi un 97% del total de sal esparcida durante la campaña de vialidad invernal 2019-2020.
En el Aeropuerto Madrid-Barajas están trabajando para restablecer la normalidad del servicio aéreo más de 1.500 personas entre el personal propio de Aena, trabajadores de las labores de limpieza de pistas del plan de invierno, aerolíneas y handling.
No obstante, la recuperación sigue siendo gradual debido a las temperaturas históricamente bajas que se registran por las noches y que obligan, por seguridad aeronáutica, a revisar de forma constante pistas, calles de rodadura y estacionamientos para retirar el hielo antes de operar los vuelos de llegadas y salidas. Este sábado se pudieron operar 341 vuelos comerciales (171 llegadas y 170 salidas) de los 381 programados, lo que supone el 89,5%.
Dispositivo
Tal y como recuerda Presidencia, la AEMET emitió su primer aviso oficial ocho días antes del inicio de las nevadas más copiosas con la publicación de una nota informativa el viernes 31 de diciembre, que fue seguida de otra el día 3 de enero, que se convirtió en aviso especial el 5 de enero. El jueves 7 se emitieron por primera vez, desde que se instauró el sistema Meteoalerta, avisos rojos por nevadas en la ciudad de Madrid, Henares y zona sur de la comunidad.
El 5 de enero, la Dirección General de Protección Civil y Emergencias emitió un aviso directo a todas las comunidades autónomas, delegaciones, subdelegaciones del Gobierno, así como a otras instituciones implicadas y reunió a la Unidad de Valoración de Riesgos, con la DGT, la Dirección General de Carreteras y la propia AEMET, para analizar las posibles repercusiones de la borrasca y articular la respuesta.
A partir de ese momento, "comenzaron sin descanso los trabajos en todas las áreas y organismos dependientes fundamentalmente de los Ministerios del Interior, de Defensa, de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y de Transición Ecológica y Reto Demográfico".
Además, los trabajos previos puestos en marcha por el Ministerio del Interior permitieron activar el dispositivo de vialidad invernal; posicionar unidades de la UME fuera de sus bases para acercarlas a los lugres de previsible mayor riesgo; preparar a las agrupaciones de Tráfico de la Guardia Civil y al sistema de aeropuertos y de transporte ferroviario; diseñar el dispositivo de embolsamiento de camiones; y garantizar la correcta distribución de las vacunas frente al coronavirus.
En cuanto la AEMET elevó la alerta el jueves 7 de enero por la dureza del temporal, el director general de Protección Civil activó la fase de preemergencia en situación operativa 1 del Plan General de Emergencias del Estado, que ha permitido desplegar todos los recursos necesarios. A partir del jueves, el Comité Estatal de Coordinación y Dirección, órgano encargado de la coordinación de todas las administraciones y actores implicados en la respuesta a la situación meteorológica, se reunió diariamente, siendo presidido en varias ocasiones por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.