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Telefónica cierra la primera fase del acceso a la red móvil de AT&T en México

Ha migrado sus clientes en casi una decena de estados mexicanos La teleco aspira a reducir deuda en 500 millones con este movimiento

Pablo Monge
Santiago Millán Alonso

Telefónica ha cerrado la primera fase del acuerdo establecido en México con AT&T a final de 2019 para utilizar la red de acceso del gigante estadounidense en el citado mercado norteamericano.

Según el grupo español, se ha concluido con éxito el uso de dicha red en las regiones 1, 3 y 4 del país, que corresponden a los estados de Baja California Norte y Sur, Chihuahua, Durango, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y el municipio de San Luis Río Colorado, en Sonora.

En este sentido, Telefónica Movistar inició, de forma paulatina, el uso de dicha red de acceso desde marzo del año pasado manteniendo de forma continua, imperceptible y sin afectación alguna todos los servicios mayoristas y minoristas móviles para sus clientes.

Junto a las regiones mencionadas, se han sumado 38 ciudades con cobertura LTE, entre las que figuran Puerto Vallarta, Tehuacán, Monclova, La Paz, los Cabos, Colima, Acapulco, Córdoba, Orizaba, Coatzacoalcos y Minatitlán. Con esta migración se han beneficiado más de 6,2 millones de clientes y que a su vez se mantienen en la red de agregación, transporte y servicios de Telefónica Movistar México.

“Gracias a la aprobación emitida por el IFT para realizar arrendamientos sobre el espectro de AT&T México, la compañía podrá mantener toda su cobertura de manera ininterrumpida, incluyendo los que operan en zonas rurales y que sólo se encuentran en la huella de cobertura de Movistar México”, dijo Telefónica.

La compañía explicó que continuará con la segunda etapa de migración durante 2021, “beneficiando a más clientes a la par de reafirmar su compromiso con todos los mexicanos para continuar trabajando en la democratización de los servicios de telecomunicaciones y reducir la brecha digital, llevando conexión a todos”.

Acuerdo

A finales de noviembre de 2019, Pegaso PCS, filial mexicana de Telefónica, firmó un acuerdo con AT&T Comunicaciones Digitales, por una duración mínima de ocho años, para utilizar las infraestructuras en el país del gigante estadounidense. De esta forma, AT&T México pasaría a prestar servicios mayoristas de acceso a última milla inalámbrica a Telefónica México.

El movimiento tenía un impacto financiero de calado. En términos operativos, el grupo español señaló entonces que buscaba hacer más sostenible su negocio y reforzar su posición competitiva en este mercado frente a América Móvil, el grupo de Carlos Slim.

La teleco señaló que el nuevo modelo de operación de Telefónica México generaría unas eficiencias operativas y financieras con un impacto positivo anual en flujo de caja de aproximadamente 230 millones de euros a partir del año tres del acuerdo.

Al mismo tiempo, la operadora precisó que este nuevo modelo de operación permitiría asimismo una utilización más eficiente y sostenible de los recursos aumentando el retorno sobre capital empleado y generando una reducción de la deuda neta adicional en el entorno de 500 millones de euros.

Entre otros impactos financieros derivados del acuerdo con AT&T, Telefónica pasaba a evitar el pago de distintos compromisos de espectro en el mercado mexicano.

Una división de Hispam

Opciones. México quedó integrada en la división Hispam, que agrupaba todas las filiales de Telefónica en Latinoamérica, con excepción de Brasil. De hecho, el acuerdo firmado con AT&T se encuadró dentro de las opciones establecidas por la teleco para esta división, que contemplaba las posibles operaciones corporativas por países.

Evolución. La división mexicana registró unos ingresos de 757 millones de euros en los nueve primeros meses de 2020, un 6,6% menos en términos orgánicos, pero un 16% menos reportado, como consecuencia de la depreciación del peso frente al euro. No obstante, Telefónica destacó que el Oibda-Capex aumentó un 132,6% en los primeros nueve meses del año.

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Sobre la firma

Santiago Millán Alonso
Es periodista de la sección de Empresas, especializado en Telecomunicaciones y Tecnología. Ha trabajado, a lo largo de su carrera, en medios de comunicación como El Economista, El Boletín y Cinco Días.

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