El Ibex celebra el pacto entre Bruselas y Londres
El selectivo español supera los 8.000 puntos; la libra sube frente al dólar
En una semana semifestiva en la que era de esperar que la actividad de los mercados decayera, la volatilidad ha vuelto a cobrar un protagonismo especial. La pandemia y el Brexit pusieron a prueba el ánimo de unos inversores que aguardaban a que la recta final de 2020 les concediera un respiro. Pero está visto que este año todo puede pasar. Después de un inicio de semana en el que las ventas llevaron a los principales índices europeos a vivir su peor sesión desde septiembre, en las jornadas posteriores los ánimos se templaron a medida que Bruselas y Londres acercaban posturas para evitar el temido Brexit sin acuerdo.
Fueron precisamente las expectativas de un inminente pacto las que el miércoles impulsaron las ganancias. Minutos antes del cierre de los mercados Bloomberg aseguraba que se había alcanzado un principio de acuerdo. El Ibex 35, que a lo largo de la jornada había registrado un tímido comportamiento, aceleró las subidas y concluyó con un alza del 1,76%. Con este ascenso el selectivo español anula las pérdidas registradas el lunes y recupera la barrera de los 8.000 puntos. A falta de media sesión para el cierre semanal, la Bolsa española despide la penúltima semana del año con un repunte del 0,45%.
Los ascensos se repitieron en el resto de Bolsas europeas, pero a diferencia de la española parece que siguen siendo insuficientes para borrar las pérdidas de los últimos tres días. El Euro Stoxx se anotó un 1,19%; el Cac francés, un 1,1%; el Dax alemán, un 1,26%; el Mib italiano, un 1,31% y el FTSE británico, un 0,65%. Al otro lado del Atlántico y con las miradas puestas en la amenaza lanzada por Donald Trump de bloquear el quinto pacto de estímulos fiscales acordado por republicanos y demócratas, al cierre de los mercados europeos el Dow Jones subía un 0,76%; el S&P 500, un 0,51% y el Nasdaq, un 0,11%.
En los últimos cuatro años la salida desordenada de Reino Unido de la UE ha sido uno de los mayores quebraderos de cabeza para los inversores y las autoridades europeas, que en los últimos meses han intensificado las negociaciones con el objetivo de evitarlo. Una ruptura a la bravas ha sido vista siempre como el peor de los escenarios por las consecuencias que esto traería para las economías, pero en un contexto de crisis como el actual el acuerdo se hacía más necesario que nunca.
El entendimiento entre Londres y Bruselas fue suficiente para que los inversores olvidaran durante unas horas el temor causado por la nueva cepa del virus. Después de que el lunes Europa cerrara sus puertas a Reino Unido para evitar una propagación de la mutación, una de las muchas que ha sufrido el virus en los más de 10 meses que lleva circulando, la Comisión Europea ha recomendado a los países de la UE que reanuden las comunicaciones con el país británico. Los inversores interpretaron este cambio de criterio como una señal de que las medidas de restricción podrían llegar a causar más daño que el propio virus, y más en una época en la que muchos confiaban en que la campaña de Navidad sirviera para mitigar los efectos de los sucesivos confinamientos.
El principio de acuerdo y el levantamiento de las restricciones se dejaron sentir con especial intensidad en firmas turísticas como IAG (7%) y Meliá (6,6%), que lideraron los ascensos de la jornada, recomponiéndose así de las pérdidas sufridas el lunes. Junto a ellas destacaron los ascensos de Sabadell (5,66%) y Santander (3,5%) dos entidades con presencia en Reino Unido. Destacadas también fueron las subidas de Repsol, que avanzó un 4,62% en una jornada en la que el Brent sumó un 2,48%, ascenso que le permite recuperar los 51 dólares por barril.
En el lado opuesto se situaron compañías de corte defensivo como Grifols (-1%), Siemenes Gamesa (-0,9%), Pharma Mar (-0,34%), Viscofan (-0,25%) y Solaria (-0,09%).
En Europa, los sectores de viajes (4%), bancario (2%) y energético (2,47%), dos de los más penalizados el lunes cuando el mercado puso en precio la nueva cepa, fueron los que hoy han liderado los ascensos. Por contra el de salud (-0,43%) fue el que registró un peor desempeño, una sintonía en la que se enmarcó el comportamiento de la Bolsa española.
El mayor apetito por el riesgo llevó a los inversores a deshacer sus posiciones en activos seguros como la renta fija. La rentabilidad de la deuda española a 10 años se aleja de los rendimientos negativos registrados la semana pasada y cerró en el 0,07%.
En el mercado de divisas la libra celebró el acuerdo con un ascenso del 1%, hasta los 1,348 ólares.