La banca española, la segunda mejor digitalizada del mundo
Seis entidades españolas, entre las 25 primeras a nivel mundial
La banca española lidera el proceso de digitalización financiera en el mundo. Según el estudio Digital Banking Maturity 2020, elaborado por Monitor Deloitte, los bancos españoles se sitúan en segunda posición mundial en transformación digital, solo por detrás de Turquía.
El informe estudia las funcionalidades que cubren los canales digitales de banca retail según las necesidades del cliente y en función de los resultados divide a los 318 bancos analizados en cuatro categorías: ‘Digital Champions’, ‘Digital smart followers’, ‘Digital adpters’ y ‘Digital latecomers’. La banca española se sitúa en el primero de ellos, (campeones digitales), junto con las entidades de Turquía, Singapur, Japón y Noruega.
Según concluye Deloitte, estas entidades ofrecen una amplia gama de funcionalidades relevantes para los clientes y una experiencia de usuario atractiva. Además, establecen tendencias digitales clave y tienen prácticas líderes en el mercado, lo que los convierte en “ejemplos de los que aprender”. No obstante, los bancos todavía necesitan mejorar los procesos de ventas digitales end-to-end (E2E).
“España y el resto de bancos de los ‘Digital Champions’ no solo superan al resto de bancos en el número de funcionalidades digitales, sino que también se posicionan tanto en eficiencia (-4.0 p.p.) como en rentabilidad financiera (+1.9 p.p.)”, explica Gerard Sanz, socio de Monitor Deloitte.
De la clasificación total de 318 bancos, 6 entidades españolas se sitúan entre los 25 primeros bancos a nivel mundial en digitalización.
El estudio muestra que antes del estallido de la pandemia del Covid-19 ya se había acelerado el proceso de digitalización, y que a raíz de la popularización de la operativa a través del móvil, este canal ha superado a la banca online como canal de posicionamiento. “España es un referente en banca móvil a nivel mundial. El cliente tiene a su disposición un amplio abanico de funcionalidades para gestionar su transaccionalidad del día a día. Igualmente percibimos como los bancos españoles están invirtiendo cada vez más en la adquisición digital de productos end-to-end tratando de ofrecer una experiencia amigable y sencilla en línea con otros sectores de actividad”, señala Sanz.