Vodafone: “Una subasta de 5G con afán recaudatorio sería un error tremendo”

La teleco frena la caída de ingresos y mejora la rentabilidad con un aumento en la base de clientes Coimbra señala que la salida del fútbol televisado fue una medida acertada

Pablo Monge

El presidente de Vodafone España, Antonio Coimbra, ha asegurado hoy que si la subasta de espectro para 5G, prevista para el primer trimestre del año, tiene un afán recaudatorio sería un “tremendo error”. En su opinión, el sector está en un momento crítico, en el que debe afrontar inversiones multimillonarias en el futuro del 5G.

En la presentación de las cuentas del primer semestre, el ejecutivo ha explicado que España tiene las mejores redes de fibra y 4G, si bien ha recordado que desplegar una infraestructura de 5G con las mismas condiciones que 4G, requeriría una inversión de 5.000 millones de euros. De extender la red 5G para cumplir con objetivos como el coche conectado, la inversión subiría hasta los 10.000 millones.

Coimbra, no obstante, ha afirmado que en las conversaciones que la teleco mantiene con el Gobierno, los mensajes que llegan desde la administración apuntan a que la subasta no tendrá afán recaudatorio, sino que tendrá como objetivo estimular los despliegues. De igual forma, Elena Otero, secretaria general de Vodafone España, ha indicado que desde el Gobierno se indica que en la subasta no habrá discriminaciones entre operadoras, y todas tendrán que afrontar el proceso de la licitación con las mismas reglas del juego.

Cuentas

Vodafone España redujo sus ingresos por servicios un 1,8% en su segundo trimestre fiscal, concluido a final de septiembre y marcado por la dura competencia en el sector, hasta 960 millones de euros, según el informe financiero presentado por el grupo esta mañana. En el primer trimestre, entre abril y junio, habían caído un 6,9% en medio del parón económico y crisis sanitaria provocada por Covid-19. En el conjunto del semestre, el descenso es del 4,4%.

Los ingresos totales en el semestre descendieron un 5,1%, hasta 2050 millones de euros, si bien en el segundo trimestre la bajada es del 2,1% en términos interanuales, situándose en 1.056 millones.

La compañía parece haber evolucionado algo mejor que sus principales competidores. Sus ingresos por servicios ceden el citado 1,8% entre julo y septiembre, frente al 7,1% de Orange España y el 3,6% de Telefónica en el mismo periodo de tiempo.

En términos de rentabilidad, el ebitda ajustado aumentó un 6% en su primer semestre fiscal, hasta 488 millones de euros, gracias a los ahorros registrados tras dejar de comprar los derechos del fútbol televisado y la reducción de loc costes operativos.

El margen de ebitda ajustado pasa del 21,3% al 23,8%, con una reducción de las amortizaciones y depreciaciones, que pasan de 621 a 531 millones de euros. El ebit, no obstante, sigue siendo negativo en 43 millones, por debajo de los 161 millones  del mismo periodo del año anterior. El beneficio operativo ajustado, igualmente, sigue siendo negativo, pero los números rojos también se reducen en el mismo importe, de 161 a 43 millones.

La operadora destaca la mejora del negocio en España, una vez que se terminaron las limitaciones a las portabilidades en España y pudieron reabrirse las ofertas comerciales. Así, el grupo señala que, durante el semestre, Vodafone España ganó 95.000 clientes móviles, otros 101.000 de fibra y en torno a 114.000 de televisión. La compañía ha destacado su crecimiento televisivo tras haber salido del fútbol hace dos años, una decisión traumática, que implicó un cambio en las líneas estratégicas de su negocio en España.

Vodafone España, que acaba de nombrar a Colman Deegan como nuevo CEO, en sustitución de Antonio Coimbra, defiende su estrategia en televisión, así como en segmentos como los datos ilimitados y el despliegue del 5G, ámbito en el que lanzó sus servicios en la primavera de 2019.

En este sentido, Coimbra ha defendido hoy la decisión tomada por la compañía hace dos años de salir del fútbol televisado. “Los hechos confirman que fue una medida acertada para la compañía”, ha dicho. Coimbra ha insistido en que la regulación penalizaba a Vodafone frente a sus rivales, indicando que había una falta de rentabilidad. “No había más remedio que salir del fútbol, aunque fue una decisión controvertida”, ha indicado. Además, ha recordado que, pese a salir del fútbol, ha ganado en torno a 95.000 nuevos clientes en su segmento televisivo, hasta superar los 1,5 millones de usuarios.

El ejecutivo ha señalado que Vodafone España ha sido capaz de alcanzar los objetivos establecidos entonces, recordando que la compañía puso en marcha una nueva organización más ágil, lanzó los datos móviles ilimitados, fue la primera en lanzar el 5G en España, y cambió su modelo televisivo, estableciendo nuevos paquetes de contenidos para la comercialización.

Coimbra ha asegurado que sin el impacto del Covid-19, Vodafone España habría registrado crecimiento en ingresos. El ejecutivo ha indicado que el impacto en el segmento del roaming, muy penalizado por el hundimiento de los viajes de los turistas a España, ha sido de tres puntos porcentuales, con lo que los ingresos por servicios, en lugar de bajar un 1,8% en el segundo trimestre fiscal, habrían subido un 1,2%

El presidente de Vodafone se ha defendido frente a sus principales competidores, a los que no ha citado expresamente, asegurando que las tendencias son muy distintas a las de nuestros rivales. De igual forma, ha afirmado que Vodafone España ha recuperado posiciones en los ingresos por cliente, llegando a 891 euros al año, frente a los 860 euros de su inmediato perseguidor.

El ejecutivo no ha querido desagregar qué crecimiento en los clientes corresponde a la marca Vodafone y cuál a la marca low cost Lowi, si bien ha insistido en que la teleco ha logrado avanzar en todos los segmentos comerciales. "Lowi no canibaliza a la marca Vodafone, que está creciendo", ha señalado.

Dentro de los cambios, Coimbra ha destacado que Vodafone ha llevado a todos sus clientes móviles a las tarifas ilimitadas. Además, ha presumido de que la compañía lanzó el 5G en España más de un año antes que sus competidores, indicando que, en la mayor parte de los servicios de los rivales, son similares al 4G. Según el directivo, son servicios de 4G con el logotipo de 5G.

Grupo

En términos generales, el grupo Vodafone confirmó sus previsiones para el conjunto del año, que pasan por alcanzar un ebitda ajustado entre 14.400 y 14.600 millones de euros. En el primer semestre, el ebitda bajó un 1,9%, por un descenso de los ingresos del 2,3%, como consecuencia del impacto de la pandemia en segmentos como las ventas de terminales o los ingresos por roaming, que se han hundido al paralizarse los viajes entre países.

Los resultados del grupo han sido bien vistos por el mercado. Las acciones de Vodafone suben en torno a un 4,5% cerca del mediodía, y tiran de otras telecos como Telefónica, que avanza casi un 4,7%, y Orange, que gana un 2,5%.

CTIL, la filial compartida con Telefónica en Reino Unido, se integrará en Vandage Towers

Vodafone sigue dando pasos en la constitución de su nueva división de emplazamientos de telefonía móvil, Vandage Towers, que mañana celebrará su día del inversor. El consejero delegado de la teleco, Nick Read, ha señalado hoy que la intención del grupo es integrar en Vandage su 50% del capital CTIL, la filial que agrupa las torres de Vodafone y Telefónica en Reino Unido.

“Hemos hecho un amplio trabajo con Telefónica, y nuestra intención es integrar CTIL en Vandage Towers, antes de la salida a Bolsa”, ha dicho Read, que ha precisado que la OPV tendrá lugar a principios de 2021.

En este sentido, Vodafone ya ha iniciado el proceso de integración en Vandage de sus torres en los distintos países europeos, incluida España.