Los avances científicos en la lucha contra el virus han servido en las últimas jornadas para dar un respiro a los mercados, pero la situación a medio plazo continúa siendo muy incierta y la volatilidad está lejos de desaparecer. Los inversores son conscientes de ello y después de la euforia de las últimas semanas han optado recoger velas y hacer caja con la realización de beneficios, una corriente que se ha extendido hoy por los principales parqués europeos. El Ibex 35 que en las últimas jornadas ha encabezado los ascensos en el Viejo Continente corrige un 0,87%, descenso que lo alejan de los 7.800 puntos.
Algo más abultadas fueron las caídas del resto de índices. El Cac francés se ha dejado un 1,52%; el Dax alemán, un 1,24%; el FTSE británico, un 0,68% y el Mib italiano, un 0,83%. La toma de beneficios se extiende también a Wall Street. Al cierre de los mercados europeos el Dow Jones y el S&P 500 retroceden un 0,5% con el tecnológico Nasdaq en tablas (0,07%).
Los valores cíclicos protagonistas en las últimas sesiones de la remontada (el solo tres días el Ibex se ha anotado un 13,4%) ha liderado hoy las caídas. Aquí las cotizadas vinculadas al turismo han ocupado un papel destacado con Amadeus como el valor más castigado de la jornada (-4,49%). No muy lejos se situaron IA (-3,31%) y Aena (-2,08%). A excepción de Sabadell (0,86%), el conjunto de las entidades que integran el Ibex 35 cotizaron en negativo. BBVA se dejó un 1,69%; Santander, un 1,3%; CaixaBank, un 1,13% mientras Bankinter y Bankia se han dejado un 0,5% y 0,29%, respectivamente.
Los valores de corte defensivo como las empresas de energías renovables y las farmacéuticas que en las últimas sesiones habían escapado al rally de las Bolsas vuelven a convertirse en los valores más alcistas. Solaria avanzó un 5,14%; Almirall, un 2,24%; Pharma Mar, un 1,51% y Grifols, un 1,15%. A ellas se suma Cellnex (1,11%). Los inversores reciben con optimismo la compra de las torres de Hutchison, la mayor adquisición de la empresa hasta la fecha.
Con la pandemia avanzando en Europa y en EE UU y las autoridades volviendo a las restricciones (Nueva York ha impuesto nuevas medidas ante el aumento de los contagios a niveles que se veían desde abril), el escenario a corto plazo se antoja complicado. La volatilidad seguirá pesando y los expertos no descartan fuertes rotaciones de carteras. Los inversores deberán decidir entre apostar por valores cíclicos con vistas a que la situación mejore a corto plazo o centrarse en valores de corte defensivo ante el empeoramiento de las economías tras la vuelta a los confinamientos. A la espera de que se encuentre una cura para la pandemia, desde Link Securities defienden que la mejor opción pasa por una cartera que combine valores de crecimiento y cotizadas value para aprovechar el rally y protegerse en caso de sacudidas.
En el mercado de deuda, las rentabilidades que en las últimas sesiones habían abandonado la tendencia bajista ante la salida de los inversores de la renta fija a la Bolsa, corrigen los ascensos. El bono español a 10 años que a comienzos de semana a punto estuvo de superar la barrera del 0,2% se sitúa en el 0,135% con la prima estable en los 66 puntos básicos. Los decensos se repiten en otras referencias como el bono a alemán con vencimiento en 2030 que pasa del -0,5% al -0,536%.
El Brent suma su cuarta sesión al alza y recupera los 44 dólares por barril.