Santander ampliará capital en 361 millones con cargo a reservas para pagar el dividendo
Como aprobó en la junta de accionistas celebrada el pasado 27 de octubre, Santander comunicó ayer que llevará a cabo una ampliación de capital en más de 361,26 millones de euros con cargo a reservas para abonar el dividendo de 0,10 euros que entregará en acciones como cupón complementario del ejercicio 2019 y que acordó congelar por las restricciones del BCE.
En la junta también se aprobó el pago de otros 0,10 euros ya en efectivo y con cargo a 2020 cuando así lo permita el BCE, que no será antes de enero de 2021, ya que la decisión del banco central no se producirá antes del 11 de diciembre.
La entidad que preside Ana Botín tuvo que suspender el pago del dividendo en abril tras la recomendación del BCE a la banca de que anulasen el abono de la remuneración al accionista para contar con hucha que les permitiese ayudar a clientes frente a la crisis otorgándoles financiación.
Para hacer frente a su abono, Santander detalló ayer a la CNMV que emitirá y pondrá en circulación un total de 722.526.720 acciones ordinarias. A pesar de su alta hucha en solvencia no instrumentará su pago mediante la aplicación del Programa Santander Dividendo Elección, ya que la previsión de no reparto de dividendos del BCE está también referida a la realización de cualquier tipo de pago en efectivo que afecte al capital de nivel 1 ordinario, es decir, de máxima solvencia, y reduzca los fondos propios en cantidad o calidad.
Si comprase los derechos de emisión para entregar después los títulos a los accionistas bajo dicho programa el banco entiende que supondría “una vulneración” de esa recomendación al constituir un pago en efectivo que reduciría los fondos propios. Por ello, y en virtud del aumento de capital, los accionistas de Santander recibirán un derecho de asignación gratuita por cada acción del banco que tengan en su haber a las 23.59 horas del día 13 de diciembre y precisarán 23 derechos para obtener un título de nueva emisión.
El día 16 se iniciará la negociación de los derechos, que se extenderá durante 15 días naturales, y el día 11 de diciembre arrancará la contratación ordinaria ya de las acciones.
Los accionistas podrán así recibir automáticamente las acciones que les correspondan o vender los derechos de suscripción. Con el comunicado de ayer a la CNMV Santander se convierte en el primer banco en anunciar un dividendo tras el veto del BCE, aunque en este caso la remuneración al accionista se lleve a cabo exclusivamente en acciones de nueva emisión y no en efectivo, fórmula que es la que limitó el supervisor, aunque la entidad pagará en efectivo otros 0,10 euros en 2021, o eso espera, como el resto de los bancos europeos, que también aspiran a repartir dividendo en 2021 con cargo a 2020.
Santander defiende que su propuesta de abonar el dividendo con cargo a la reserva por prima de emisión “es coherente” con el propósito de abonar a los accionistas entre un 40% y un 50% del beneficio ordinario consolidado y de hacerlo en efectivo, siempre y cuando no exista una recomendación regulatoria que desaconseje su reparto previsto en 2021.
Santander perdió en los nueve primeros meses del año 9.048 millones, pero logró un beneficio de 1.750 millones en el tercer trimestre estanco, y espera cerrar el año con un resultado ordinario superior a los 5.000 millones de euros.
Ana Botín se comprometió ante los accionistas el 27 de octubre a que el banco pagará el 100% del dividendo en efectivo a partir de este año. La remuneración total de 2019 ascenderá a 0,20 euros por acción una vez que pueda pagar también en efectivo. Santander ha generado 14 puntos básicos de capital en el trimestre y 33 puntos básicos en el año, lo que le ha permitido fortalecer aún más su balance y alcanzar en el tercer trimestre una ratio de CET1 del 11,98%, provisionando 19 puntos básicos de capital para el pago de dividendos en efectivo con cargo al ejercicio 2020.