San José rebaja a la mitad su beneficio a septiembre, hasta los 8,9 millones
La compañía mantiene sus ventas en 689 millones, pero el ebitda cae un 15,5%
Grupo San José ha declarado este jueves un beneficio de 8,9 millones de euros en los tres primeros trimestres del año, con una reducción del 50,7% pese a preservar parecidos niveles de actividad que el año pasado.
La compañía que preside Jacinto Rey mantiene sus ventas en el nivel de los 689 millones de euros, un 0,1% superiores a las de septiembre de 2019 y con un 63% de la cifra cosechado en el mercado doméstico.
El ebitda se deteriora un 15,5%, bajando a 37,5 millones de euros y dejando un margen del 5,4% (6,47% hace un año).
“Debido a la diversificación en actividad y geográfica del grupo, el impacto [de la pandemia] a cierre de los nueve primeros meses del ejercicio 2020 está siendo limitado, reflejándose principalmente en una reducción de la actividad y de los márgenes con respecto a lo previsto, así como en un ligero incremento de las provisiones y deterioros registrados”, ha señalado la constructora en el informe sobre los resultados remitido a la CNMV.
En la recta final del año San José sigue siendo “moderadamente optimista” y espera que los efectos de la actual crisis sanitaria y económica en sus negocios sean limitados.
De la partida de ingresos, casi el 92% del total depende de la actividad de construcción, que aporta 632 millones (un 2,5% más). Las obras también tienen un peso predominante en el ebitda, con el 71%, y en la cartera de contratos, con un 70% de los 1.705 millones de euros (62% con clientes privados) que mantiene la empresa como reserva de trabajo.
Este área esencial para San José arroja márgenes del 4,2% y del 1,9% de ebitda y ebit, respectivamente. Su resultado antes de impuestos, de 8,6 millones de euros en positivo, cae un 48%.
La posición neta de tesorería del grupo a 30 de septiembre se sitúa en una magnitud de 148,6 millones de euros (en comparación con los 126,9 millones de euros que señaló a 31 de diciembre de 2019), lo que representa una mejoría durante el ejercicio 2020 del 17,1%.
La empresa reduce sus posiciones pasivas en un 18,4%, hasta los 154,2 millones de euros, tras la amortización de bonos emitidos en Chile y cuyo vencimiento final se producirá en el mes de junio de 2021.
La deuda financiera incluye el soporte de proyectos sin recurso a la matriz por un total de 35,6 millones de euros (71,4 millones a 31 de diciembre de 2019), de los que 31,4 millones se consideran deuda financiera corriente, teniendo los restantes 4,2 millones de euros, vencimiento a más largo plazo.