Cos ve margen para más fusiones en España sin producirse un oligopolio
Cree que si se endurecen las condiciones crediticias sería aconsejable ampliar las medidas relativas a la financiación de las empresas
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, considera que hay margen para que se produzcan más fusiones bancarias, tanto en Europa como en España, como consecuencia de la baja rentabilidad, que es "uno de los principales retos" que afronta el sector bancario.
Reducir costes e incrementar sus inversiones en tecnología forma parte de las recetas que ha dado el gobernador a la banca para mejorar su eficiencia y su rentabilidad, anteponiendo en su discurso incluso estas opciones a las fusiones.
En todo caso, y pese a la fuerte reestructuración realizada por la banca española entre 2008 a 2018, con la reducción drástica del número de bancos, oficinas y plantilla, el gobernador del Banco de España ha asegurado en su intervención que "existe margen para que se produzca alguna consolidación en el sector que contribuya a hacer que las entidades, y el sistema en su conjunto, sean más resistentes". Rechaza, de hecho, que aunque se produzcan nuevas fusiones pueda incurrirse en un oligopolio.
Considera que el nivel de competencia en el sector "es elevado", pues las entidades financieras no compiten solo entre ellas, sino también con nuevos operadores tecnológicos que están fuera del perímetro regulatorio, y cuya rivalidad es cada vez mayor.
Aumento de la morosidad
El gobernador del Banco de España ha reconocido que en los próximos meses tendrá lugar, inevitablemente, un deterioro de la calidad del crédito en los balances de los bancos, como consecuencia de la fuerte contracción de los ingresos de las empresas y los hogares en los últimos meses. Según sus previsiones, estos deterioros se concentrarán en el momento en que finalicen las moratorias o venza la carencia de los préstamos avalados.
Aunque existe "una notable incertidumbre" de cara al futuro sobre cuánto aumentará la tasa de morosidad, Hernández de Cos ha apuntado que el incremento será más elevado en las empresas de menor tamaño y que operan en los sectores de mayor interacción de lo social y, en el caso de los hogares, en las exposiciones no garantizadas con hipotecas. En este sentido, ha recordado que las entidades ya están anticipando parte de las provisiones que podrían tener que realizar en el futuro.
Para evitar que la crisis "dañe gravemente" la estabilidad del sistema financiero, lo que la haría más profunda y duradera, el gobernador ha llamado a "estrechar la vigilancia sobre los riesgos para la estabilidad financiera y estar preparados para dar una respuesta contundente, a escala europea, en caso de que se materialicen".
Cos estima que el programa global de avales públicos de 140.000 millones de euros, medida que ha considerado "crucial", podría cubrir alrededor del 75% de las necesidades de financiación de las empresas españolas. También ha defendido las medidas de flexibilización de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) o el aplazamiento en el pago de algunas obligaciones tributarias para apoyar a las empresas con necesidades de liquidez como consecuencia del contexto actual de crisis.
Defiende, de hecho, que los ERTE puedan prolongarse cierto tiempo de manera selectiva, según ha declarado en la clausura del seminario El sistema financiero y la crisis del Covid-19 organizado por Apie y la UIMP en Santander. En conjunto, el gobernador ha defendido las medidas puestas en marcha por el Gobierno y por el BCE para mitigar los efectos de la crisis que ha provocado la pandemia del coronavirus. Y una de las que más ha apoyado ha sido la línea de avales del ICO.
Según un análisis realizado por el Banco de España con distintos ejercicios de simulación, aun teniendo en cuenta estas medidas, los resultados sugieren que el porcentaje de empresas con necesidades de liquidez en el periodo que cubren del segundo (el más intenso de la crisis sanitaria, que coincide con el confinamiento) al cuarto trimestre de este año aumentaría casi 10 puntos porcentuales como resultado de la pandemia, hasta el 70%, siendo más elevados los porcentajes de empresas con necesidades de liquidez entre las grandes empresas y en las actividades relacionadas con el ocio y el turismo.
De estas necesidades, casi el 90% derivaría del vencimiento de obligaciones financieras pasadas y el 50% podría ser cubierta utilizando los activos líquidos y el importe no dispuesto de las líneas de crédito con que contaban antes de la crisis.
Los análisis del Banco de España apuntan a que a través de la línea de avales del ICO, que ha canalizado financiación por 99.000 millones de euros a empresas (el programa asciende a 140.000 millones tras la última ampliación, de los que 40.000 millones van destinados a inversión), "podría cubrirse en torno al 75% de las necesidades de financiación mencionadas".
El resto, según ha explicado el gobernador, tendría que financiarse con la disposición de los activos líquidos de las propias compañías, con el uso del volumen no dispuesto de las líneas de crédito concedidas o recurriendo a nueva deuda sin avalar.
Tras estos resultados, Hernández de Cos ha rebajado ligeramente su opinión de antes del verano, en la que pedía una ampliación de la línea de avales para las empresas. De esta forma, considera que sería "aconsejable" su extensión si se produce un endurecimiento de las condiciones de concesión de crédito a las empresas durante el tercer trimestre, como se desprende de la última encuesta sobre préstamos bancarios, a lo que se sumaría el mantenimiento con un "tono acomodaticio" de las medidas de la política monetaria durante un periodo prolongado, además de la ya mencionada extensión de manera selectiva por sectores de los ERTE.
El gobernador del Banco de España ha insistido en que los mecanismos de apoyo al crédito "deben focalizarse en primar el acceso a estos recursos de las empresas con perspectivas sólidas de viabilidad, de cara a facilitar el necesario proceso de reasignación de los recursos productivos entre empresas y sectores".
Por otro lado, el gobernador ha reconocido que es "altamente probable" que muchas compañías salgan de la crisis con unos niveles de endeudamiento más elevados, lo que "puede lastrar la recuperación y ser una fuente de vulnerabilidad".
La pandemia, así, tendrá duras consecuencias para las empresas, que puede arrastrarlas a tener problemas de liquidez y aumento de su morosidad.
Ha sostenido que los recursos del fondo de recuperación europeo deben utilizarse para apoyar de forma sostenible la reestructuración y modernización del tejido productivo.
También ha asegurado que hasta ahora la banca ha concedido 1,3 millones de euros en moratorias crediticias, por un volumen de 45.000 millones de euros, lo que representa el 7% del total de la cartera de créditos de las entidades financieras.
Con este panorama, y ante los nuevos rebrotes, el gobernador considera que la "recuperación es incompleta, desigual y con alto grado de incertidumbre".
Aunque no ha querido adelantar los nuevos escenarios económicos que maneja el Banco de España (que se darán a conocer a mediados de este mes), sí ha asegurado que espera un crecimiento para el tercer trimestre del PIB por encima de dos dígitos. La ministra de Economía, Nadia Calviño, anunció que su departamento prevé un crecimiento del 10%.
Consenso para aprobar los Presupuestos
Pablo Hernández de Cos ha llamado a alcanzar "acuerdos amplios" para afrontar una "urgente" estrategia de crecimiento que es lo que necesita España en estos momentos.
Cos ha afirmado que, si bien en el corto plazo la respuesta a la crisis sanitaria debe acompañarse de medidas fiscales "decididas" para amortiguar su impacto, debe ponerse en marcha una estrategia global de crecimiento con un horizonte de medio plazo que incluya el diseño de un programa de consolidación fiscal para su aplicación conforme vayan superándose los efectos más adversos de la crisis y se consolide la senda de recuperación.
En su opinión, la necesaria expansión fiscal en el corto plazo debe venir acompañada de una agenda de reformas "ambiciosa" que afronte los desafíos estructurales de la economía española y el diseño de un plan de saneamiento de las cuentas públicas, para su implementación una vez que se consolide la recuperación.
El gobernador ha dejado claro que la persistencia de un endeudamiento público elevado, como el que generará esta crisis, reduciría los márgenes de actuación para hacer frente a futuras perturbaciones adversas, expondría la economía a una situación de vulnerabilidad crónica y lastraría su capacidad de crecimiento.
El gobernador ha reclamado a todos los grupos políticos consenso para que el Gobierno pueda aprobar los Presupuestos Generales del Estado.