BMS mejora su negocio en España gracias a las áreas de cáncer y cardiovascular
El laboratorio espera la autorización de nuevos usos del antitumoral Opdivo
La multinacional farmacéutica Bristol-Myers Squibb (BMS) vio impulsado su negocio en España el pasado año gracias a sus medicamentos innovadores en las áreas de oncología y cardiovascular. El laboratorio estadounidense facturó 317 millones de euros, un 8,4% más de forma interanual, según se recoge en sus cuentas de la filial española depositadas en el Registro Mercantil. A su vez, ganó 25,6 millones frente a los 15,9 millones de 2018 y repartió 36 millones en dividendos.
“En el año 2019, la compañía continúa con la consolidación de la nueva división de negocio dedicada a la inmunooncología, dentro de una estrategia de renovación del portfolio de medicamento comercializado, tanto por razones estratégicas como la pérdida de patentes y contratos de exclusividad en las áreas terapéuticas tradicionales para la compañía (virología)”, explica el laboratorio de Nueva York en sus cuentas. “Dentro de un mercado altamente competitivo con la aparición de otras moléculas destinadas a tratamientos de determinados tipos de cáncer, la distribución de las ventas –refleja la empresa en el informe de gestión– se ha visto impactada por la aparición de nuevos competidores, siendo particularmente importante en el tratamiento del cáncer de pulmón”. La farmacéutica indica que ese impacto en el tratamiento para pulmón ha sido compensada por nuevas indicaciones autorizadas por Sanidad a finales de 2018.
La firma indica además que junto a los medicamentos frente al cáncer, el área cardiovascular “continúa su evolución muy positiva” gracias a nuevos anticoagulantes orales.
Esta empresa es una de las impulsoras de los nuevos tratamientos conocidos como de inmunoterapia en cáncer o inmunooncología gracias a la comercialización del fármaco Opdivo. “La compañía espera continuar obteniendo autorizaciones de comercialización del medicamento Opdivo en nuevas indicaciones terapéuticas”, afirma respecto a sus previsiones de evolución futura. “En el área cardiovascular, la compañía espera que la evolución del mercado de anticoagulantes orales continúe evolucionando positivamente en los próximos años”.
Por otra parte, la matriz de este laboratorio adquirió en 2019 a su rival Celgene y en las cuentas expresa que no tiene conocimiento del impacto comercial y operativo en la filial española.