El Thyssen abre sus puertas virtuales para grupos por 600 euros
El museo, que reanuda su actividad el 6 de junio junto al Prado y al Reina Sofía, organiza recorridos a la carta y con guía profesional para grupos de 25 personas
El estado de alarma le ha servido al Museo Nacional Thyssen Bornemisza para descubrir todas las posibilidades que ofrece la tecnología y mostrar las obras de arte que se exhiben en la pinacoteca. Durante más de dos meses, y a pesar de estar con las puertas cerradas debido a la pandemia desde el pasado 12 de marzo, el museo se ha seguido mostrando al mundo a través de la página web y de una intensa actividad en las redes sociales, que les han servido de soporte para organizar visitas virtuales a las exposiciones y a la colección permanente, así como para la difusión de vídeos, cursos, conferencias o listas de reproducción musicales emitidos en directo. A pesar de que la actividad digital ya era una prioridad para la institución, tal y como señaló este miércoles el gerente, Evelio Acevedo, esta se mantendrá e intensificará en el futuro.
En esta nueva realidad, el Thyssen, que abrirá sus puertas el próximo 6 de junio, a la vez que el Museo del Prado y del Reina Sofía, organizará visitas guiadas online y en directo, explicadas por una guía especializada. Se trata de un recorrido por las obras maestras de la colección, aunque el itinerario se hará a la carta. “Es una experiencia más rica que la visita física, porque no es un producto enlatado, y abre la posibilidad de seguir visitando el museo”, explicó Acevedo durante la presentación telemática.
En su opinión, la tecnología permite abrir el abanico de posibilidades y preparar visitas para empresas o para grupos. “Tiene la ventaja de que es flexible y se adapta a muchos formatos y temáticas”, detalló. De hecho, las visitas están pensadas para grupos de hasta 25 personas, que se presentan a través de la plataforma Meet, tienen una duración de 50 minutos y un precio de 600 euros.
El proyecto, según detalló Teresa de la Vega, guía del Thyssen, se ha desarrollado en los dos últimos meses y medio, con la finalidad de poder vivir el arte desde la distancia, sin perder el contacto y la atención personal, incluyendo recursos que las visitas sobre el terreno no permiten, con documentos, fotografías y macrofotografías o radiografías.