La industria de materiales de obra traza un plan para amortiguar un golpe de 19.000 millones
Las propuestas enviadas al Gobierno generarían 3 puntos de PIB y 500.000 empleos en tres años, según CEPCO
El sector industrial afín a la construcción ha dibujado un escenario desolador para centenares de empresas. Un informe elaborado por la patronal CEPCO, remitido ayer al Gobierno, estima que este año se producirá la pérdida de unos 70.000 empleos entre los fabricantes de materiales de construcción, bajando a los 300.000 puestos de trabajo; se teme la destrucción de más de medio millar de empresas, de un total de 33.560, y un desplome valorado en 19.000 millones entre demanda interna y exportaciones, que el año pasado sumaron 64.000 millones.
En el mismo dosier se apuntan soluciones para la salida de la crisis generando tres puntos de PIB y 500.000 empleos en tres años, además de un retorno fiscal del 50%. Ruina o recuperación en un texto de 40 páginas. El colectivo detalla la necesidad de inversión en infraestructuras del agua, sanitarias, energéticas o educativas; una mayor apuesta por la conservación de carreteras, y planes de vivienda social e incentivos a la rehabilitación.
CEPCO prevé la pérdida de 70.000 empleos y un tercio de las exportaciones en este 2020
Como ayuda directa a los fabricantes, se demanda una prórroga en los pagos a la Seguridad Social, que se eviten impuestos sobre beneficios previstos y que se agilicen las devoluciones de IVA. Otras medidas sugeridas para inyectar oxígeno en esta industria son la inclusión de todos los CNAEs en la primera línea de créditos ICO; la habilitación de una política de aval de deuda comercial ante el derrumbe de la calificación de riesgo de muchos clientes, o “suavizar” durante seis meses los costes energéticos.
Foto de una crisis
CEPCO, que engloba a 15 asociaciones nacionales de fabricantes de cemento, ladrillo, azulejos, vidrio, piedra natural, tubos, estructuras metálicas, material eléctrico, y un largo etcétera, recibió como primer alivio que las plantas pudieran arrancar, tras una parada brusca el 29 de marzo, una vez que Industria abrió la mano a la actividad fabril dedicada a la exportación. Desde entonces, las instalaciones funcionan la mitad de su capacidad, apunta el colectivo, variando en función de que los materiales estén sujetos a exportación o no, y que participen más o menos en reforma y rehabilitación.
Desde la asociación que dirige Luis Rodulfo se ha chequeado que buena parte de la obra pública está en marcha; la edificación residencial ha tenido una reactivación gradual desde el 13 de este mes; la edificación no residencial está al 70%, tras la primera quincena de parón, y aún están por volver la reforma y rehabilitación.
La industria pide una moratoria fiscal, rebajas durante seis meses en la energía y entrada en las línea de créditos ICO
En cuanto a la exportación, CEPCO advierte de la notable afectación por la pandemia de varios de los diez principales destinos de los materiales de construcción españoles, como son Francia, Reino Unido, Italia y EE UU. “Es posible una caída de hasta un tercio de las exportaciones en 2020”, señala el documento. En este terreno, urge un Plan ICEX especial de internacionalización de materiales de construcción, con componentes multilaterales especialmente hacia América latina y África.
Ajustes de empleo y cobro de facturas
La mitad de los fabricantes de materiales de construcción han optado ya por el ERTE, entre plantillas con una antigüedad media de 20 años y formadas en un 90% por contratos indefinidos. Desde este campo se apoya que las medidas de flexibilización de estos ajustes sean homogéneas en todos los sectores, y que “más que una prohibición de despido, se establezca una obligación de recuperación laboral en paralelo a la entrada de actividad”.
Otra medida clave, a ojos de esta industria, es que se atajen los retrasos en el pago a proveedores. “No puede ocurrir que el contratista principal cobre anticipos de certificaciones de obra y no los traslade al pago de sus suministradores de material”, concluye CEPCO.