Abertis mantiene la propuesta de pagar un dividendo de 875 millones a ACS y Atlantia
Celebra este martes su junta marcada por el desplome de los tráficos y el aviso de S&P sobre la eventual pérdida del 'invesment grade'
Abertis mantiene la propuesta de repartir un dividendo total de 875,10 millones de euros entre sus dos accionistas, Atlantia y ACS, que planteará para su aprobación a la junta de accionistas que celebra este martes, 21 de abril.
El pago del dividendo se mantiene tal como se propuso hace un mes, según indicaron en fuentes del sector, pese al impacto de la actual crisis en el tráfico de las autopistas de Abertis y la reciente advertencia de Standard & Poors sobre una eventual pérdida del invesment grade.
Este dividendo, que abona con cargo a reservas, constituirá así una importante inyección de liquidez para el grupo italiano controlado por la familia Benetton y la constructora que preside Florentino Pérez para reforzar sus posiciones ante la actual crisis.
En concreto, Atlantia percibirá 437,5 millones de euros en virtud de la participación del 50% más una acción que tiene en Abertis. ACS cobrará otros 262 millones por su 30%, y su filial constructora alemana Hochtief, 175 millones más en virtud de su 20%.
Impacto en los tráficos
Abertis propuso el reparto de este dividendo en la convocatoria de la junta que realizó a comienzos de marzo, unas semanas antes de que estallara la crisis que ha impactado en los tráficos de las autopistas del grupo, fundamentalmente las que tiene en España y Francia.
En el caso de España, donde opera el 60% de las vías de pago, encadena seis semanas consecutivas perdiendo usuarios, con caídas que se han ido pronunciando desde la del 3% que contabilizó la primera semana hasta el 84,8% de la última. En lo que va de año acumula un descenso del 21%.
En Francia, donde gestiona el 22% de la red, suma siete semanas de descensos de tráfico que alcanzan hasta un 82,3%.
Eventual rebaja del 'rating'
En este contexto, a comienzos de este mes de abril Standard & Poor's (S&P) advirtió a Abertis de la posibilidad de bajar un escalón la nota de 'BBB-' que le tiene asignada, lo que le llevaría a perder el 'investment grade' ante los desplomes de tráfico provocados por la crisis.
En concreto, avisó de que le bajará la nota si el ratio entre la generación de flujo de caja por la operación de sus autopistas y su endeudamiento cae por debajo del 10% en el que actualmente se sitúa tras descender desde el 12% que mantenía hasta ahora.
Pendiente de la toma de RCO en México
Abertis afronta la crisis en tanto tiene pendiente de cerrar la compra acordada el pasado año de RCO, una de las principales compañías de autopistas de México.
Esta operación se enmarca en la estrategia de crecimiento que aborda, impulsada por sus socios para restituir los activos de concesiones que vencen en España, generar sinergias con sus accionistas y convertirse en uno de los grandes gestores de infraestructuras del mundo.
Abertis cerró el año con un beneficio atribuible de 352 millones de euros, un 79% menos por las plusvalías registradas un año antes con la venta de Cellnex y el impacto negativo de 749 millones que se anotó al asumir el macropréstamo' de casi 10.000 millones que sus dos accionistas firmaron para comprar la compañía.
En caso de descontar estos efectos extraordinarios, el beneficio de Abertis se sitúa en 1.101 millones de euros al cierre de 2019, cuando también soportaba un endeudamiento neto de 22.963 millones de euros.