Rhône Capital se hace con el control del gigante español de explosivos Maxam
El fondo que pilota el expresidnete de Aena, Jose Manuel Vargas, sumará un paquete de acciones adicional al 45% que ya ostenta
Rhône Capital apuesta por el Maxam. El fondo que pilota en España José Manuel Vargas ultima la compra de un paquete de acciones adicional del gigante español de los explosivos Maxam. Supondrá que el fondo pase a controlar ya la mayoría del capital, según indican fuentes financieras a CincoDías.
Este fondo de private equity estadounidense se dio un golpe en la mesa en el mercado español en 2018 con la toma del 45% de Maxam de manos de Advent, que había llegado a explorar incluso una salida a Bolsa de la compañía que fundó el propio Alfred Nobel en 1872. La operación se cerró este mismo verano. Advent había adquirido la compañía de Vista Capital (private equity de Banco Santander) y Portobello (por entonces Ibersuizas).
El 55% de las acciones estaba hasta ahora repartido entre un centenar de directivos y empleados. Rhône Capital comprará una parte. Entre estos accionistas minoritarios destaca el histórico presidente de Maxam, José Fernando Sánchez-Junco, pero también otros insignes nombres del empresariado español, como Javier Targhetta, presidente de Atlantic Copper, o Santiago Bergareche, expresidente de Cepsa y Vocento. También estaba presente en el consejo Santiago Eguidazu, presidente de Alantra, hasta que abandonó en diciembre el consejo, tal y como publicó CincoDías.
Rhône Capital, por el momento, ha comunicado al departamento de Competencia de la Comisión Europea la toma de nuevas acciones. Está previsto que el equipo que dirige la vicepresidenta Margarite Vestager emita una opinión al respecto antes del 14 de mayo.
Multinacional española
Maxam se lanza a esta operación pese a que el impacto del coronavirus ha secado por completo las fusiones y adquisiciones en todo el mundo. El Covid-19, de hecho, ha paralizado la actividad en sus plantas nacionales e internacionales. Está pendiente calcular el impacto en sus cuentas. Cuenta en la actualidad con más de 6.000 empleados en cinco continentes, con 80 instalaciones industriales y operaciones comerciales en más de 50 países. A inicios de año la compañía presentó un ERE sobre e torno a un centenar de trabajadores, tal y como publicó este periódico.
Por el momento, Maxam cerró 2018 con un beneficio de 21,6 millones, mientras que los beneficios se situaron en los 1.130 millones de euros. El ebitda fue de 158,45 millones, de acuerdo al informe financiero anual depositado en el MARF.
La compañía provee soluciones de voladura para minería, canteras y obra civil; cartuchos y pólvoras para su uso en caza y tiro deportivo; productos y sistemas para el sector de defensa y seguridad, y producción de materias primas clave en la actividad nitro química. Cuenta con cinco divisiones. La principal es Terra Solutions, dedicada a la producción de explosivos para minerías y obras de infraestructuras, con unos ingresos de 750 millones, más de un 60% del total. Le sigue el área de defensa (254 millones) y a cierta distancia las de munición deportiva y la química. Maxam es una multinacional presente en todo el mundo. Si bien cerca del 30% de su negocio corresponde con la UE, destaca el peso de Norteamérica, África y Asia.
La compañía cerró 2018 con una deuda con entidades de crédito de 712,1 millones. En julio del año pasado refinanció este pasivo en un macrocrédito de 600 millones, con vencimiento en 2024. Está dividido en dos tramos. Uno de 450 millones a largo plazo y un préstamo revolving de 150 millones. BBVA y Santander actuaron como coordinadores de la operación, seguidos de Bankia. En un tercer escalón trabajaron CaixaBank, Erste Bank y el ICO. En la financiación a corto plazo, la química cuenta con un programa de pagarés en el MARF, por un saldo vivo de 100 millones.