PSA negocia un ERTE para unos 14.000 empleados en España y Portugal
La compañía también recurrirá a fórmulas de flexibilidad laboral, como el teletrabajo o la modificación de calendarios
PSA negocia con los sindicatos la aplicación de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causa de fuerza mayor en sus plantas de España y Portugal, que suman más de 14.000 empleados y que pararon su actividad la semana pasada por la Covid-19.
La compañía asegura que su prioridad es mantener el empleo y que con el ERTE se protege a los trabajadores "hasta que se reanude la normalidad en la actividad industrial y comercial" en la Península Ibérica. También recurrirá a fórmulas de flexibilidad laboral, como el teletrabajo o la modificación de calendarios.
Los expedientes se aplicarán en los centros de trabajo o actividades impactadas directamente por las dificultades de suministro de piezas o por las restricciones derivadas de la declaración del estado de alarma. Recordar que si el ERTE se presenta por causa de fuerza mayor la empresa no necesita la aprobación de la parte social.
"De esta forma, Grupo PSA no destruirá empleo y estará preparado para el retorno a la actividad industrial y comercial tan pronto sea posible la reanudación de sus operaciones", explican fuentes de la empresa.
El grupo automovilístico francés anunció hace una semana el cierre progresivo de todas sus plantas de producción en Europa por la extensión del coronavirus. En España, tiene plantas en Zaragoza, Vigo y Madrid.
En el caso de Vigo, la parte social pide a la empresa que se incluya en el ERTE a la totalidad de la plantilla -unas 6.500 personas- y que esta cubra el 100% de las vacaciones y las pagas extraordinarias. El expediente se aplicaría desde el 16 de marzo hasta que finalice el estado de alarma u otras circunstancias vinculadas a la crisis sanitaria.
Además, reclama que el complemento salarial se sitúe en la media de lo que están aplicando otros fabricantes, en torno al 85%, según han explicado a CincoDías fuentes de UGT. Las mismas fuentes señalan que los trabajadores han pedido a la dirección de la compañía que se le haga contrato de un año al colectivo eventual de la factoría para que así pueda acceder al desempleo, así como que la empresa asegure el pago de la prima variable de este año, o adelante los pagos recogidos en el ERTE en caso de que haya retrasos.
En la planta Zaragoza, sindicatos y empresa han acordado en una primera ruenión que el ERTE comience el 30 de marzo y se extienda hasta que las autoridades sanitarias así lo determinen, aunque las condiciones no se harán oficiales hasta mañana, según fuentes de UGT.
Quedan excluidos del ERTE los nacidos de enero a marzo de 1959 y que hayan elegido la opción de contrato de relevo, así como los relevados de 1958 que actualmente están devolviendo. Sin exceptuar a estos, la compañía cuenta con unos 5.500 empleados.
La sociedad asumiría el 80% del salario más antigüedad y el complemento personal de puesto de trabajo. A diferencia de expedientes de regulación de empleo anteriores, la parte proporcional de los días que los trabajadores estén en el desempleo la empresa también complementará hasta el 80% la paga extra de esos días, por lo que la percepción de esta estará en torno al 95% de la habitual.
Las nueve jornadas iniciales en las que la fábrica estará parada -del 17 al 27 de marzo- se computarán con cargo a vacaciones colectivas. Los empleados que hayan disfrutado de algún día de vacaciones flotantes o no tengan los nueve días de vacaciones colectivas se les computará la diferencia como paros técnicos en su bolsa individual.
Por otra parte, en la de Madrid se verán afectados unos 1.300 empleados, según fuentes sindicales, pero no será hasta hoy cuando la empresa traslade al comité de empresa las condiciones económicas. Esta factoría tiene la peculiaridad que cuenta con almacén de recambios y un área de preparación de vehículo nuevo. Los sindicatos piden que también cesen su actividad mientras dure la crisis sanitaria. PSA emplea a 1.000 personas en Mangualde (Portugal) .
Las marcas del grupo -Peugeot, Citroën, DS Automobiles y Opel- están trabajando con las redes comerciales para asegurar un dispositivo de atención mínima en posventa, con la reparación y mantenimiento de vehículos de primera necesidad, el cumplimiento de campañas de seguridad y la venta directa de piezas y accesorios a recambios a talleres de reparación.
PSA ha puesto a disposición del Sistema Nacional de Salud todo el material sanitario disponible en sus plantas de España y Portugal y ha cedido un monitor multiparamétrico que muestra datos procedentes de electrocardiograma, medición de presión arterial no invasiva, nivel de saturación de oxígeno, respiración y temperatura corporal, entre otros equipos.