La crisis pone en cuestión la gran subasta de espectro 5G
Las telecos advierten sobre la tensión financiera que supone en este momento Señalan que están enfocadas en garantizar las comunicaciones
La subasta de espectro de la banda de 700 MHz (frecuencias que será destinada para el móvil 5G), la mayor que tendrá lugar este año en España, está en clara cuestión a causa de la crisis generada por el coronavirus covid-19, que ha llevado al Gobierno a declarar el estado de alarma, según coinciden distintas fuentes del sector.
La licitación está prevista para mayo y junio, tal y como dijo el secretario de Estado de Telecomunicaciones, Roberto Sánchez, el 6 de marzo, antes de que se desencadenaran los acontecimientos. Entonces señalo que faltaban por cerrarse algunas cuestiones normativas. Fuentes de la secretaría de Estado indicaron ayer a este periódico que se sigue teniendo el mismo horizonte temporal para realizar la subasta.
Pero ahora la situación es muy compleja y de extrema gravedad. Las operadoras han concentrado sus esfuerzos en cumplir la principal prioridad, que no es otra que garantizar las comunicaciones para los usuarios. Sus infraestructuras son consideradas críticas para atender servicios fundamentales.
Además, las telecos creen que en un momento como el actual, marcado por la paralización de la economía, no es un buen momento para someterlas a tensiones financieras, como supone siempre el tener que acudir a una subasta de espectro, que implica un fuerte desembolso, según fuentes del sector.
Las compañías creen que en esta situación es complicado afrontar una licitación así. El proceso también conlleva la presentación de avales bancarios y otra documentación en la que deben trabajar con empresas de otros sectores, que también están envueltos en la sacudida general que sufre España.
Las operadoras, igualmente, no descartan que se pueda producir un retraso en la entrega del espectro que se está liberando para el uso móvil procedente de las televisiones, en el denominado segundo dividendo digital, dada la situación. Este proceso va casi en paralelo con la subasta.
España está obligada a concluir la liberación de la banda de 700 MHz antes del 30 de junio para cumplir los compromisos con Bruselas. Fuentes jurídicas señalan que en situaciones extraordinarias se han suspendido los plazos, y en este caso se está en una situación de emergencia que no se vivía en Europa desde la segunda guerra mundial (España no participó). “Lo lógico es que se aplace la subasta y se establezcan nuevos plazos”, dicen.
En términos generales, el Gobierno está valorando positivamente el esfuerzo que están haciendo las operadoras en salvaguardar el servicio en un momento de fuerte incremento del tráfico por las redes como consecuencia de la generalización del teletrabajo y el ocio en el hogar.