La cotización a la baja dificulta más la privatización de Bankia
Con la cotización en mínimos históricos, la venta generaría minusvalías por parte del al Estado por su participación del 60%
El avance del coronavirus frena los planes de privatización de Bankia a corto plazo. Con el desplome de la Bolsa en los últimos días debido a la incertidumbre que genera la extensión del brote en Europa, las acciones de la entidad han caído a mínimos históricos, lo que complica aún más los planes para buscar un inversor privado que asuma la mayor parte del capital.
El Gobierno (tanto el actual de Sánchez como el anterior de Rajoy) ha venido posponiendo la privatización del banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri debido a las minusvalías que generaría la venta de la participación del 60% que controla el Estado a través del FROB. De hecho, el propio Goirigolzarri explicó en la presentación de resultados del ejercicio 2019 que no esperaba movimientos para privatizar Bankia hasta que los tipos de interés experimentaran una subida, lo que estimularía el negocio de la banca en general y animaría la inversión bursátil en los bancos.
Precisamente, una de las consecuencias que arroja la propagación del coronavirus en Europa es el retraso de una subida de tipos por parte del BCE que la banca lleva esperando ante la dificultad de generar resultados.
Desde el banco no han realizado todavía estimaciones de un posible impacto económico (el negocio está en mercado español y dependerá de cómo avance el virus por el territorio nacional), aunque ha dispuesto medidas internas para “asegurar la continuación de las actividades de la entidad”.
En ese sentido, ha puesto en marcha planes de teletrabajo para sus empleados y ha animado a sus accionistas a que sigan de manera remota la junta general que se celebrará en Valencia el próximo 27 de marzo.