Telefónica descartó pujar en la subasta de espectro en Colombia por los altos precios
La decisión coincide con la reorganización aprobada por la teleco en Hispanoamérica
Decisión de calado de Telefónica en Colombia. La teleco descartó pujar por nuevas frecuencias en la subasta de espectro para telefonía móvil 4G que tuvo lugar en el país la pasada semana por los altos precios. “Telefónica Movistar Colombia informa que participó en la subasta de espectro radioeléctrico convocada por el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones y, dado los elevados precios, decidió no optar por dicha asignación”, indicó la teleco en un comunicado.
La compañía añadió que cuenta con un total de espectro relevante, que equivale a más del 20% del total en uso en bandas bajas y altas del país, que le permite prestar con eficiencia y calidad los servicios móviles a sus clientes. “Telefónica Movistar dará un adecuado uso a sus recursos invirtiendo en nuevas tecnologías con el fin de continuar mejorando la calidad del servicio a nuestra base de clientes, así como fortaleciendo su presencia con fibra óptica en todo el país”, señaló.
En la subasta, el Gobierno colombiano concedió espectro de las bandas de 700 MHz y 2.500 MHz a otros tres grupos, América Móvil, Millicom International Cellular y Novator Partners, que será destinado a la expansión de los servicios 4G. En su conjunto, el estado captó cerca de cinco billones de pesos colombianos (unos 1.350 millones de dólares).
Fuentes del mercado señalan que en la subasta de 700 MHz el precio pagado duplica la referencia media en los mercados latinoamericanos, mientras que en 2.500 MHz es tres veces superior. En principio, los precios pagados beneficiarían inicialmente al Estado colombiano, puesto que los ingresos serán mayores. Ahora bien, estas fuentes recuerdan que cuando los costes de espectro son mayores, los despliegues de redes posteriores se dilatan en el tiempo, porque los recursos de las telecos son limitados.
Los precios del espectro han forzado a Telefónica a realizar movimientos en otros países de Latinoamérica. Quizá el más reciente es en México. Allí, Telefónica firmó un acuerdo hace pocas semanas con AT&T para usar las redes móviles en el país del gigante estadounidense. De esta forma, Telefónica evitará el pago de distintos compromisos por la adquisición de espectro.
Reorganización
La decisión de Telefónica de no acudir a la subasta de espectro en Colombia coincide con un momento de fuerte sacudida en el grupo, tras la decisión de realizar una segregación operativa del conjunto de los negocios en Latinoamérica, con excepción de Brasil, que han pasado a integrarse en una nueva filial. El objetivo principal es atraer inversores y captar posibles sinergias con otros agentes de los mercados.
“Con este spin-off operativo, Telefónica inicia una revisión estratégica de su portafolio en Hispam con el doble objetivo de modular la exposición a la región, al tiempo que se crean las condiciones para maximizar su valor vía crecimiento, consolidación y posibles operaciones corporativas”, dijo la teleco. El propio presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, viajó hace pocos días a los principales países de Hispanoamérica, entre los que figuraba Colombia, para explicar la operación.
Disputas en el país
Socios. Telefónica es socia del propio Gobierno en su filial Coltel. Así, posee un 62,5% del capital y el Estado colombiano el 37,5% restante. Ambos socios realizaron en el verano de 2017 una ampliación de capital superior a 1.840 millones de euros, para poder atender de forma anticipada a todos los compromisos de pago en relación con el PARAPAT (consorcio propietario de los activos de telecomunicaciones y gestor de los fondos de pensiones de las compañías que dieron lugar a Coltel).
Telefónica ha mantenido distintas pugnas con las autoridades colombianas en los últimos años, incluyendo alguna que ha terminado en el Ciadi, como la vinculada a la renovación de licencias, tras pasar por las distintas jurisdicciones judiciales nacionales.