Los empresarios del Corredor del Henares lanzan un SOS a la UE
Reclaman fondos comunitarios para incentivar el regreso de la industria a una zona de Madrid muy castigada por la deslocalización
La Asociación de Empresarios del Henares (AEDHE), que representa a 25.000 empresas de Madrid, junto con los alcaldes de los principales ayuntamientos del Corredor del Henares (Alcalá de Henares, Coslada, Torrejón de Ardoz, San Fernando, Meco, Guadalajara y Azuqueca de Henares) y los dos sindicatos mayoritarios (CC OO y UGT), presentaron el martes una iniciativa en el Parlamento Europeo para la Reindustrialización del Corredor del Henares.
La propuesta pretende frenar el proceso de desindustrialización de la zona (que concentraba hasta hace poco una parte importante de la gran industria madrileña) y hacerla competitiva, digitalizando a las pequeñas pymes e integrándolas en la economía circular. Y para ello necesitan fondos que, tal y como reconoce Jesús Martín, presidente de Aedhe, podrían salir de los fondos de cohesion, de las partidas para financiar a las regiones más desafavorecidad o del programa para la Competitividad de las Empresas y para las Pequeñas y Medianas Empresas (Cosme). “Representamos a 20.000 empresas y 300 polígonos en los que el nivel de digitalización medio no llega al 10%. Necesitamos fondos para mejorar las capacidades tecnológicas de las pymes e integrarlas dentro de la cadena de la economía circular”, reconoció ayer Martín durante la presentación de la propuesta en público.
En su opinión, solo de esa manera podrán revertir la imparable deslocalización de la industria en el Corredor del Henares y atraer nuevos actores que estén dispuestos a instalarse en una zona que abarca un radio de 50 kilómetros desde la capital madrileña, y en la que todavía están grandes fábricas como Mahou y grandes centros logísticos como los de Carrefour, H&M o Calidad Pascual. “La industria es el sector tractor que mueve toda la economía. Es el que fija población y el que genera el empleo más cualificado y mejor remunerado. Sin industria, además, no hay servicios”, recalca Martín respecto a una zona, en la que los servicios representan en la actualidad el 85% de la actividad, mientras que la industria apenas suma un 13% cuando antes de la crisis llegaba al 30%”.