¿Te han hackeado la contraseña de alguna web? Chrome puede ayudarte
Aprovecha las novedades de la nueva versión.
Es uno de los temores que todos tenemos en internet cuando navegamos y tenemos que loguearnos con usuario y contraseña en algún servicio, sitio de noticias, tienda de comercio electrónico, etc.: que en uno de esos hackeos que habitualmente conocemos por los periódicos nuestro perfil se haya visto comprometido.
Obviamente, esas noticias se hacen eco de las plataformas más grandes, pero pocas veces de las que no ocupan las primeras planas. Así que cualquier ayuda es bienvenida y, en este punto, Chrome incorpora una herramienta muy útil que ya viene de serie con la versión 78 y que era, hasta ese momento, uno de los plugin más descargados: Revisión de contraseñas.
Actívala y quédate tranquilo
Ese plugin, que puede que conozcáis por su nombre en inglés, Password Checkup, se instala en el navegador y comprueba, cuando entramos en una web en la que tenemos u perfil creado, si ha sido expuesta y necesitamos cambiarla. De esta manera, recibimos un aviso que nos recomienda que hagamos el cambio en ese preciso instante.
Como os decimos, el plugin ya está inserto dentro de la versión 78 de Chrome pero viene desactivado, por lo que tendréis que recurrir a las viejas flags para ponerlo en marcha. Si os parece un método demasiado engorroso, podemos hacerlo más sencillo pulsando en el enlace que os hemos puesto más arriba. De esa manera hacéis lo mismo pero sin escribir una sola línea de código.
Una vez que la opción 'Revisión de contraseñas' esté activa, Chrome comparará la información de nuestros usuarios y contraseñas que tiene almacenado en nuestra cuenta de Google y emitirá una alerta en caso de que corra peligro. En ese instante, nos avisará de que es necesario cambiar la contraseña y podremos hacerlo directamente desde el plugin, que se encargará de guiarnos por todo el proceso.
Google tendrá todas nuestras llaves
Eso sí, es importante decir que para que Chrome sea capaz de saber en qué sitios web tenemos usuarios activos que usamos a menudo, tendremos que abrirle todas las puertas de nuestra información para guardarla en sus servidores (o dónde sea que lo haga). Eso podría causaros cierto resquemor, aunque nos pondría en la situación de tener que elegir entre un mal menor o un mal mayor: ¿es mejor que nuestras cuentas estén en peligro en servicios y webs de toda índole o blindarnos pagando el precio de que Google sepa todas nuestras contraseñas? "Ser o no ser", que diría el clásico.
