Sargadelos recupera los beneficios tras recortar un 25% los gastos de personal
La cerámica gallega ganó 120.000 euros el año pasado
El grupo cerámico gallego Sargadelos, que en 2014 declaró el concurso de acreedores, volvió a la senda de los beneficios en 2018, el segundo ejercicio que cierra en positivo desde que entrase en situación concursal.
En él la compañía Fábrica de Cerámica de Sargadelos, que comprende las operaciones de su principal fábrica, la de Cervo (Lugo), registró un resultado de 120.000 euros, frente a las pérdidas de 117.000 de 2017. “Se han mejorado de modo importante los parámetros que atenazaban la viabilidad futura de la empresa entendiendo que ésta se encuentra en situación de salida para poder reiniciar un desenvolvimiento normal en el mercado”, explica la compañía en sus cuentas.
La mejora de la rentabilidad se produjo, por un lado, gracias al incremento del 11% en sus ventas, que superaron los tres millones de euros. Se trata de la mejor cifra de negocios que Sargadelos logra desde 2010 y tercer año seguido al alza.
Pero otro elemento que explica la vuelta a la rentabilidad tiene que ver con los gastos de personal. Estos se redujeron en 2018 en cerca de un 25%, pasando de 2,5 millones a 1,9. El grupo, propiedad de Segismundo García, también su administrador único. disparó en 2017 los gastos en esta partida después de que el Tribunal Supremo confirmase la anulación del ERE acometido en 2010, y que afectaba a más de una veintena de trabajadores de la fábrica de Cervo. Ocho llegaron a ser despedidos, y la sentencia obligaba a readmitirlos o indemnizarlos. Como consecuencia de ese proceso, la empresa incluyó como gastos cerca de 630.000 euros para hacer frente a las indemnizaciones y a los pagos a la Seguridad Social y al Servicio Público de Empleo Estatal.
Los conflictos laborales han sido habituales en los últimos años. Durant agosto de 2018, Segismundo García anunció a la plantilla el despido de hasta 49 trabajadores, de los que se llegaron a ejecutar 20. Sin embargo, el proceso se paró después de que la plantilla revocara a la delegada de UGT en la empresa, Rogelia Mariña, quien mantenía un conflicto directo con el propietario. El sindicato llevó la situación a los juzgados, y el Tribunal de Justicia de Galicia sentenció en mayo de este año que la revocación de Mariña, vinculada a los 49 despidos, supone una “vulneración del derecho fundamental de libertad sindical”. La compañía cerró 2018 con una plantilla de 82 trabajadores, nueve menos que un año antes, tras readmitir a algunos de los depedidos en agosto, explican desde la empresa.
El grupo Sargadelos se compone, además, de otras dos sociedades: Fábrica de Cerámica del Castro, con una fábrica en Sada (A Coruña), y Porcelanas Sargadelos, que gestiona las puntos de venta propios de la firma, alrededor de una quincena.
La primera registró unas ventas de 1,8 millones en 2018, un 9% más, y un beneficio de 57.500 euros, un 35% menos. Las segunda mantuvo sus ingresos en 5,8 millones, aunque el beneficio cayó un 60%, a 34.500 euros. Las tres sociedades del grupo cerraron en positivo y con una plantilla conjunta de 151 trabajadores.
Expectativas de crecimiento en 2019
Previsiones. Después de recuperar la rentabilidad y encadenar tres años seguidos de crecimiento en ventas, desde Sargadelos explican que su previsión es la de dar continuidad a esos resultados en 2019, tanto a nivel de ingresos como de beneficios.
Deuda. Sargadelos entró en concurso de acreedores en 2014, y salió del mismo dos años después,después de firmar un convenio que aplicaba una quita del 50% sobre su deuda. Esta quedó en unos cinco millones de euros, con un calendario de pagos hasta 2024. En la actualidad, le queda por saldar alrededor de un millón y medio de euros.