Adif flexibiliza la entrada de competencia en el AVE
Los operadores podrán pedir capacidad en los ejes que se adapten a sus planes comerciales, y se trabaja en un marco de cánones a cinco años
La liberalización del tráfico de pasajeros en ferrocarril llega bastante más abierta de lo que estipuló Adif en un principio. El paso de la declaración de red de 2019, documento que marca las normas del juego de la liberalización ferroviaria, por el periodo de alegaciones y el filtro de la CNMC, ha dejado novedades que permiten al citado administrador de la infraestructura ferroviaria ofertar servicios prácticamente a la carta tanto a Renfe como a sus futuros competidores. La declaración de red ha sido aprobada esta mañana por los consejos de administración de Adif y adif Alta Velocidad.
Los operadores del AVE y demás servicios comerciales de larga distancia podrán solicitar capacidad allí donde encuentren mayor interés comercial, no estando obligados a pedir ni todos los servicios ni todos los ejes de los tres paquetes que Adif ya había puesto sobre la mesa.
En otro paso que ofrece mayor visibilidad a los transportistas, Adif se ha abierto a cambiar la figura jurídica del canon que cobra por el uso de la infraestructura. Este funciona en la actualidad como una tasa y se establece anualmente a través de la Ley de Presupuestos Generales del Estado, después de pasar por la CNMC y un periodo de consulta pública. La novedad es que se estudian en el Ministerio de Fomento una serie de modificaciones legislativas para que Adif pueda establecer propuestas de cánones por periodos de cinco años, en una fórmula similar a la que rige en la política tarifaria de Aena.
Esta propuesta de precios de Adif, que surge a petición del sector ferroviario, será recogida a buen seguro en el convenio que la empresa pública tiene por firmar con Fomento, en el que se contemplarán las necesidades de inversión y costes básicos como el del mantenimiento de la red.
Tres ejes principales
El primer corredor ferroviario principal donde Adif prevé batalla es el Madrid-Barcelona-Frontera Francesa. En sus vías se ofrecen un total de 53 tráficos diarios, en comparación con los 27 de media actuales, lo que arroja un incremento de tráfico del 50%.
El segundo eje es el Madrid-Levante (Valencia y Alicante), donde se dispone un 40% de incremento potencial de tráfico con el paso de 37 tráficos diarios prestados a día de hoy por Renfe a un total de 53.
Y el tercer gran eje en esta liberalización es de Madrid-Toledo-Sevilla-Málaga. En este caso, el salto en tráfico es del 75%, llegando a las 61 circulaciones diarias desde las 35 actuales.
Adif ha detallado esta mañana, a través de un comunicado, que la oferta de capacidad global sube un 65% en los corredores de alta velocidad, con 165 circulaciones por sentido en los tres corredores en comparación con las 99 actuales. Quedan fuera de los tres grandes ejes los tramos en los que solo se puede circular con trenes dotados de ejes de ancho variable: Barcelona-Valencia y Sevilla-Cádiz.
A partir de la aprobación de la declaración de red, las empresas podrán solicitar capacidad hasta el 31 de octubre; la empresa dependiente de Fomento comunicará la pre-adjudicación de la capacidad marco antes del 15 de diciembre de este año y las vías se abrirán a la competencia el 14 de diciembre de 2020.
Se prima el volumen
Pese a abrirse a la solicitud de operación en cualquier línea de la red, Adif sigue priorizando la fórmula de la Oferta de Capacidad Marco en los tres ejes principales, primando el volumen de circulación en un periodo de hasta diez años. Es decir, Adif va a atender todas las peticiones de capacidad, siempre que no se superen los surcos disponibles y sean compatibles, y permitirá que un paquete pueda ser adjudicado a más de un operador. Pero se dará prioridad al candidato que se comprometa a hacer un uso más intensivo de todos los corredores.
Adif defiende que este modelo facilita, como mínimo,"que puedan operar de forma óptima al menos tres empresas ferroviarias". La CNMC, por su parte, tendrá la potestad de revisar los acuerdos superiores a cinco años al final del proceso.
Otra novedad es la figura del candidato u operador potencial, que es la empresa dispuesta a operar servicios de transporte de pasajeros por ferrocarril pero que aún se encuentra en la fase de tramitación. Estas podrán solicitar capacidad marco y suscribirla una vez que dispongan de licencia de empresa ferroviaria y habilitación.