BBVA gana un 9,8% menos por la caída en Turquía, EE UU y España
El grupo, que no descarta crecer nuevamente con compras en España y EE UU, obtiene un beneficio de 1.164 millones de euros en el primer trimestre
Si la semana pasada BBVA anunció un cambio de imagen y la unificación de las marcas de sus filiales, el consejo de administración comunicó ayer otras novedades significativas, aprovechando el análisis de los resultados de la entidad del primer trimestre del año. Así, el actual presidente, Carlos Torres Vila, ha decidido recuperar la figura del vicepresidente, cargo no ejecutivo que había desaparecido hace casi dos décadas, aunque se mantenía en los estatutos de la entidad, aunque el anterior presidente, Francisco González, había optado por no contar con este puesto.
El consejo, así, ha nombrado a José Miguel Andrés Torrecillas vicepresidente de la entidad, y ha designado a Juan Pi Llorens consejero coordinador, en sustitución del propio Andrés Torrecillas. De esta forma, Pi Llorens se convierte en el contrapeso de Torres en el banco. El ex presidente de EY España ha sido señalado por los antiguos directivos del banco por dejación de sus funciones por las presuntas escuchas ilegales realizadas presuntamente por Villarejo por encargo de González. El consejero delegado de BBVA, Onur Genç, sin embargo, ha asegurado que estos cambios no han tenido nada que ver con las críticas de los exdirectivos de BBVA.
El banco también ha nombrado a Jaime Caruana presidente de la comisión de auditoría. El consejo de administración ha acordado también redistribuir las funciones de esta comisión de auditoría, además de las de riesgos y cumplimiento, y la comisión de nombramientos y gobierno. Pese a estos cambios, la comisión delegada permanente estará presidida por Carlos Torres y serán vocales Onur Genç, Carlos Loring, José Maldonado, Susana Rodríguez y Jaime Caruana.
Estos cambios se producen el mismo día en el que el banco da a conocer los primeros resultados de Torres correspondientes a enero-marzo, periodo en el que obtuvo un beneficio atribuido de 1.164 millones de euros, un 9,8% menos que un año antes, debido, en parte, a que aumentó un 27% sus saneamientos por problemas en Turquía y EE UU (por sus créditos al consumo) y a las mayores provisiones dotadas por el deterioro económico global.
Si se excluyen de la comparativa los resultados de BBVA Chile, que el grupo vendió en julio de 2018, el resultado hubiera sido un 7,7% inferior. El consejero delegado del grupo, Onur Genç, aseguró que estas cuentas muestran “unas dinámicas positivas, con un margen neto creciendo por encima del 10%, gracias a la recurrencia de los ingresos y a una importante mejora en la eficiencia operativa”.
Sin embargo, estas mejoras del negocio no compensaron los mayores deterioros financieros del trimestre. La entidad incrementó un 31,4% el reconocimiento de pérdidas debido a ajustes macroeconómicos relacionados con la normativa internacional IFRS 9.
El beneficio en España cayó en el trimestre un 14,7% al sumar unas ganancias de 345 millones, aunque la caída se inicia desde el margen de intereses, que desciende un 4,9%, las mayores provisiones y las actualización de los valores de tasación de los activos adjudicados, afectaron al beneficio final del banco en el país. El grupo prevé que este margen en España descienda un punto o dos a lo largo del año, influido por los bajos tipos de interés. También bajaron los resultados por las operaciones financieras, aunque se compensaron con la menor necesidad de provisiones.
En Estados Unidos los beneficios fueron de 127 millones se redujeron un 34,8%, por las mayores provisiones. De cualquier forma, BBVA confía en EE UU, país en el que aprovecharán oportunidades de compra si se producen, lo mismo que en España, siempre que creen valor para el accionista, aunque el banco mantiene su estrategia de crecer orgánicamente.
Turquía aportó 142 millones al resultado del grupo, un 29,2% menos a tipos de cambios corrientes entre enero y marzo de 2018. México volvió a ser su gran motor, con una mejora del 10,6% tras ganar 627 millones de euros. Su rentabilidad sobre recursos propios (ROE) descendió en el trimestre al pasar del 11,5% de diciembre al 9,9% de marzo de 2019, por efecto de los menores beneficios, pese a todo, es uno de los bancos más rentables del mapa español. El capital CET 1 fully loaded, se mantuvo en el 11,3%, aunque su objetivo es llegar al 12% en el menor tiempo posible.
Petición al nuevo Gobierno
Caso Villarejo. El consejero delegado de BBVA, Onur Genç, aseguró que el grupo no ha sufrido impacto alguno directo “que sea relevante” sobre el negocio o en la cotización a raíz del escándalo de las supuestas escuchas masivas efectuadas por la empresa Cenyt, vinculada con el comisario José Manuel Villarejo. “No vemos ningún impacto directo”, afirmó, para añadir que están colaborando con la justicia.
Demanda al nuevo Ejecutivo. Onur Genç advertido de que los impuestos no deben penalizar a sectores que no generan externalidades negativos para una economía, como el sector bancario. “España necesita un sistema fiscal eficiente”, remarcó. Y añadió que los impuestos no deben de penalizar la creación de trabajo ni el crecimiento de las empresas, pero sobre todo que no debe castigar los sectores que no generan externalidades negativos como es el bancario. detalle alguno sobre el estado de las pesquisas emprendidas.
España. El directivo calcula que el grupo terminará el año con un crecimiento plano de créditos en España. Los gastos seguirán bajando debido a su gestión “muy meticulosa”.