Los inversores ya pueden irse de vacaciones
Con revalorizaciones de más del 20% en el año, la Bolsa estadounidense, y en menor medida la europea, recuperan con creces lo perdido en 2018
“Sell in may and go away”. Según este dicho, los inversores bien podrían deshacer ya posiciones y marcharse de vacaciones hasta noviembre. Y más este año, con subidas de hasta el 23% en el Nasdaq –que toca nuevos récords históricos– y superiores al 10% en el resto de los principales parqués europeos, estadounidenses y asiáticos. 2019 comenzó con fuerza. Después de que el S&P 500 registrara su peor diciembre desde 1931, con un desplome del 9,2%, se apuntó el mejor enero desde 1987 –tras sumar un 7,87%–. En el balance del año, Wall Street ya recupera con creces lo perdido en 2018, algo que también sucede en el Cac francés, aunque no aún en el Dax o en el Ibex.
Las Bolsas europeas suman en todo caso notables alzas en 2019. En España, el Ibex se revaloriza más de un 10% y recupera los niveles de septiembre, a pesar de ser uno de los índices europeos que menos sube en el año por el elevado peso del sector bancario.
Los analistas coinciden en que el fuerte impulso experimentado por la renta variable en los cuatro primeros meses del ejercicio llega gracias al cambio de tono de los bancos centrales. Ante una desaceleración del crecimiento económico, el Banco Central Europeo ha retrasado la subida de tipos y la Fed contempla un único aumento para 2020.
Tras una revalorización tan fuerte en un periodo de tiempo tan corto, surge ahora la tentación de recoger beneficios para evitar las incertidumbres que siguen latentes en el mercado. El grado de ralentización de la economía mundial está aún por conocerse, mientras continúa sin cerrarse un acuerdo comercial entre EE UU y China y sin que haya una roja de ruta clara para el Brexit.
Las gestoras están recomendando a sus clientes reducir posiciones en los activos de riesgo tras las subidas desde enero
Desde Abante reconocen que gran parte del recorrido anual previsto para las Bolsas ya se ha completado y, de hecho, han reducido su exposición a renta variable del 65% al 55%, aunque aún están sobreponderados. Sin embargo, su director de inversiones, Ángel Olea, prefiere no vincular la decisión de reducir exposición a Bolsa con el dicho bursátil antes mencionado y recuerda que las fuertes subidas de estos meses responden a un efecto rebote tras el desplome registrado en la última mitad del año.
En Atl Capital tampoco se rigen por este refrán, aunque también están recomendando a los clientes que han recuperado sus inversiones comenzar a reducir posiciones en los activos de riesgo. No obstante, su director de inversiones, Ignacio Cantos, da una explicación al “sell in may and go away”: en noviembre y diciembre comienzan a planificarse las inversiones para el nuevo año y se realizan las compras pertinentes. El primer trimestre suele ser positivo en los resultados de las empresas, impulsando sus acciones. Sin embargo, abril y mayo son meses en los que los inversores deben hacerse cargo del pago de impuestos, por lo que deshacen posiciones, también de cara al verano, una época en la que prefieren no tener preocupaciones.
Por último, el final del periodo vacacional supone la llegada de uno de los meses más temidos por los mercados, septiembre, debido a las fuertes caídas bursátiles que suelen producirse en este periodo.
Lo cierto es que, independientemente de lo ocurrido en periodos anteriores, los analistas se muestran muy cautos para lo que queda de año. Los expertos de Unigestion consideran que las elevadas valoraciones actuales de los activos estarán en riesgo en el segundo trimestre, momento en el que volverán a aparecer los temores a una desaceleración económica y el mercado se enfrentará a unos resultados empresariales no tan buenos como espera.
“Los mercados serán ahora muy sensibles a cualquier cambio en el sentimiento. Con razón, muchos inversores están preocupados por que podamos haber alcanzado las rentabilidades máximas, especialmente en Estados Unidos”, añade.
EE UU se anota las mayores ganancias en una década
El Nasdaq lidera las ganancias en el año con una subida del 23%. Los otros dos principales índices no se quedan atrás: el Dow Jones se anota un 17,8% y el S&P 500, un 19%. Unas cifras, las mejores en una década para los cuatro primeros meses del año, que los sitúan en máximos históricos.
Las Bolsas europeas también acumulan fuertes subidas, aunque el Ibex o el Mib italiano tienen mejores antecedentes en los últimos 10 años: el selectivo español subió un 14,6% entre enero y abril en 2017 mientras que el italiano sumó un 21,2% en 2015.