El Banco de España notifica 160 requerimientos a la banca por publicidad ‘engañosa’ hasta marzo
Reclama que rectifiquen las promociones que considera poco transparentes, especialmente las referidas al interés TAE de los créditos
Los bancos siguen siendo poco transparentes en su publicidad. El Departamento de Conducta de Mercado y Reclamaciones del Banco de España ha notificado 160 requerimientos a las entidades financieras para que rectifiquen su publicidad de productos bancarios en el primer trimestre de 2019, frente a los 30 de hace un año. La cifra es llamativa porque representa más de la mitad de todas las actuaciones que llevó a cabo el Banco de España en esta materia durante los 12 meses de 2018, cuando registró 309 casos de publicidad. Se sigue confirmando así que la letra demasiado pequeña en la publicidad de la banca se mantiene, lo que impide que los ciudadanos comprendan las condiciones de los productos que les ofrecen.
El requerimiento es una comunicación formal en la que se da un plazo de dos días hábiles a la entidad afectada para que modifique el anuncio o suspenda su difusión.
Los motivos más habituales de estas notificaciones giran en torno a la TAE (Tasa Anual Equivalente), bien por discrepancias en su cálculo o por no aparecer en la publicidad de productos de financiación sin intereses pero que incluyen el cobro de comisiones.
El Banco de España tiene entre sus funciones el control de la publicidad de los productos bancarios para que los clientes reciban una información clara, suficiente y objetiva. Para ello, ha reforzado sus mecanismos para monitorizar la publicidad de productos y servicios en redes sociales y nuevos canales digitales de comunicación.
El Banco de España someterá próximamente a audiencia pública una nueva circular sobre publicidad para adecuar la normativa a los cambios que se han ido produciendo en esta actividad desde la aprobación de la vigente, en 2010.
La transparencia se ha vuelto una de las obsesiones del gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos. De hecho, el responsable de la institución supervisora puso en marcha en marzo inspecciones por sorpresa en las oficinas bancarias. En concreto, los inspectores visitaron las sucursales de 12 entidades distintas para comprobar como era el nivel de protección del cliente y la transparencia informativa.
Durante varios días en la primera quincena de marzo, los inspectores de conducta de mercado y reclamaciones visitaron sin avisar 189 oficinas bancarias. Y se descubrió que no todo era tan transparente como era de desear. Era la primera vez que se hacía una inspección así, que se repetira.
El objetivo de esta estrategia es verificar el grado de cumplimiento de la normativa de transparencia informativa y protección del cliente. El Banco de España quiere cerciorarse de que en esa relación directa es la correcta en cuanto a la comercialización de los productos financieros, sobre todo aquellos que han despertado más conflictos en los últimos años, como las hipotecas, los préstamos personales , las tarjetas de crédito, o las preferentes.