El arma de KKR para hacerse con Telepizza sin subir el precio de la opa
KKR puede retirar la aceptación mínima del 90%. Seis fondos, que han entrado tras el anuncio de opa, copan el 15% del capital
El plan de KKR para hacerse con Telepizza junto a Torreal, Artá Capital y J Safran Group se ha complicado más de lo esperado. Pese a controlar ya el 28% y tener comprometido un 13,7% adicional, la operación ha supuesto un imán para un nutrido grupo de inversores que se han hecho fuertes en el capital y exigen al fondo de capital riesgo una mejora de la oferta, actualmente a 6 euros por acción, para no hacer descarrilar la opa.
Desde que el 21 de enero el fondo de capital riesgo pilotado en España por Alejo Vidal-Quadras anunció la operación, seis gestoras de fondos –Barclays, Polygon, Perpetual, Highcleare, Ibercaja y Water Island– han comprado un 15,27%, un paquete valorado en 94,5 millones. La carta que remitió Perpetual a KKR añade dificultades al proceso. Según informó Bloomberg, en esa misiva afirmaba que el precio objetivo de las acciones de Telepizza está entre los 7 y los 10 euros, por encima del precio de la salida a Bolsa de 2016.
Todo depende de una condición que ha incluido KKR a la opa: que los dueños del 90% de las acciones sobre las que se dirige la oferta acudan a la opa. La normativa de opas establece este umbral como el mínimo a partir del cual el comprador puede obligar a los accionistas minoritarios a vender sus acciones para sacar a esa compañía de Bolsa (squeeze-out, en la jerga).
Tan solo el rechazo de tres de esos seis inversores –Polygon con un 5,44%, Perpetual con un 3,04% y Highcleare con un 2,52%– podrá tumbar la opa. Están por ver el papel que jugarán dos accionistas de la compañía desde antes de la opa, IG Investment y Citi, que suman un 7%. Ninguno de estos dos inversores suscribió un compromiso de venta en la opa, como sí hicieron Santander AM, Axxion, Alliance Bernstein y Formuepleje, que abarcan en total el 13,71% del capital.
Sin embargo, KKR se guarda un as bajo la manga. En el mismo documento del anuncio de la opa el fondo afirma que "podrá renunciar al cumplimiento de estas condiciones", que se detallarán en el folleto. El fondo remitió este documento a la CNMV a finales de enero, que lo admitió a trámite el 8 de febrero. El regulador tiene 20 días para dar el visto bueno, un plazo que puede reiniar a placer.
KKR podrá entonces rebajar el porcentaje mínimo de aceptación a un nivel que le resulte más cómodo (ya tiene comprometido un 41%) y poner a los fondos en la disyuntiva de venderles su participación o ver cómo el valor de sus acciones se hunde en Bolsa inmediatamente después de la conclusión de la opa. Podrá entonces emitir una orden de compra en mercado a 6 euros por acción o incluso a un precio inferior. Es decir, tendrá la opción de excluir a la compañía de Bolsa a ese precio o incluso a uno inferior.
No en vano, los títulos de Telepizza cotizaban a 4,4 euros por unidad antes de que los rumores de opa en el mercado forzasen a la CNMV a suspender la cotización. Pese a que los 6 euros que ofrece KKR están un 36% por encima del precio anterior a la opa, Telepizza cerró ayer aún por encima, a 6,24 euros. El mercado cotiza que los fondos podrán doblar el pulso a KKR, que se verá obligado a subir la opa o que aparezca un caballero blanco. Adecuar el precio ofertado a la cotización de Telepizza le costará a este fondo y sus socios 17,26 millones adicionales a los 431 millones que se iba a gastar.