Rover Grupo tantea una compra en EE UU y se lanza a por los 1.000 millones en ingresos
Crea un área de Licitación Internacional y se abre a Canadá y Noruega La hoja de ruta hasta 2025 sucede a la reordenación de negocios
Alcanzar los 1.000 millones de facturación en 2025 y entrar en Canadá y EE UU, país este último en el que analiza una adquisición, son algunos de los hitos que se ha marcado a corto y medio plazo la empresa de obra civil Rover Grupo, antes Rover Alcisa.
El conglomerado que preside Alfredo Rodríguez Verdugo ha diseñado un plan estratégico a seis años vista que marca el camino para cuadruplicar ingresos e intensificar la búsqueda de negocio en el exterior. Noruega sería otro de los mercados por conquistar, junto al refuerzo en Suecia, Polonia, Francia, Colombia, Uruguay, Argelia, Arabia Saudí o Emiratos Árabes Unidos, donde ya está presente.
Esta referencia entre las constructoras no cotizadas de la patronal Anci ha configurado un comité de dirección para la estrategia global, junto a nuevos departamentos de Licitación Internacional y de Contract Management. Se trata de liderar consorcios donde el volumen de obra lo permita o controlar los riesgos en alianzas con compañías de mayor volumen.
Rodríguez Verdugo llevó durante la crisis una política de cero endeudamiento externo, reinvirtiendo beneficios. En esta nueva etapa, vuelve a abrirse al crecimiento inorgánico para cumplir lo que ha denominado Meta 1000/2025. Un reto que a día de hoy la incluiría entre las diez mayores referencias españolas de la construcción.
Pese al objetivo de expansión geográfica, una de las máximas que sirve de frontispicio al plan estratégico es priorizar la rentabilidad por encima del volumen. Alfredo Rodríguez y su equipo también se han impuesto licitar en países estables y con seguridad jurídica.
Rover inició su andadura exterior en 2010, llegando a participar en la construcción de la línea de alta velocidad La Meca-Medina. En España, antes incluso de que se encauzara la recuperación económica, se hizo con la especialista en obra portuaria Cyes, y en el mercado concesional tomó posiciones, junto a Sarrión y Cyopsa, ante el plan de concesiones de carreteras prometido por el Ministerio de Fomento.
Esta constructora mediana, con una nómina que supera los 700 empleados de una veintena de nacionalidades, tiene sus fortalezas en el ferrocarril y los puertos. Al inicio del año lanzó nueva identidad corporativa, pasando de Rover Alcisa a Rover Grupo, estrenó imagen de marca y simplificó su estructura de negocios. Estos últimos son Rover Infraestructuras, Rover Rail, Rover Maritime, Rover Edifica, Rover Homes y Rover Concesiones.
La cartera de contratos alcanza los 1.653 millones, de los que 940 millones corresponden a obras firmadas en España, por los más de 700 millones que debe a otros mercados. Por áreas, construcción aporta 667 millones (404 en España y 263 en el exterior), la actividad inmobiliaria contribuye con 616 (284 millones en proyectos locales y 332 millones en el extranjero) y las concesiones suman 370 millones de euros (250 millones en nuestro país y 120 millones fuera).