Citibox busca 246 millones para retar a Correos y Amazon con sus buzones inteligentes
La empresa ficha a Marsh Risk & Capital y a Alantra para su expansión
La startup española Citibox quiere instalar sus buzones inteligentes en los edificios de una decena de capitales europeas. Para financiar este plan de expansión, y de la mano de Marsh Risk & Capital y de Alantra, llama a las puertas del mercado para obtener financiación por 246 millones de euros en los próximos cuatro años.
El objetivo de la empresa es parecido a las apuestas de Correos, con CityPaq, o de Amazon, con sus puntos de recogida Amazon Lockers. Citibox instala y gestiona buzones en los que los repartidores pueden depositar directamente los paquetes que un cliente adquiere a través de internet sin necesidad de que esté en casa. A diferencia del modelo del CityPaq, con Citibox la firma de mensajería no tiene que hacer una entrega previa en una oficina de Correos.
Los planes de esta compañía, según explica su fundador y consejero delegado, David Bernabeu, a CincoDías, pasan por instalar unos 1,7 millones de buzones antes de 2023, cuando ahora cuenta con unos 8.000.
El primer objetivo de Citibox es instalar 310.000 dispositivos en Madrid en los próximos 14 meses, que cubran el 60% de los edificios de la ciudad, frente al 0,07% actual. Para ello iniciará este mismo mes de enero presentaciones (road show, en la jerga) con inversores, en las que, de la mano de Alantra, espera captar 26 millones en deuda con vencimiento en cinco años y otros cinco millones en capital. En febrero se cerrarán los acuerdos y marzo se desembolsarán los fondos, según el actual calendario. Esta fórmula, con un 80% de deuda y un 20% de fondos propios, es la que prevén replicar en cada ciudad a la que lleguen.
Una vez conquistada Madrid, Citibox entrará también este año en Barcelona, aunque aplaza a 2020 buena parte de su expansión por la Ciudad Condal y también el salto internacional, con su desembarco en París. Al año siguiente irá a Londres, Fráncfort, Berlín y Hamburgo. Y entre 2022 y 2023 su expansión será por Ámsterdam, Stuttgart y Múnich.
Para conseguir la financiación suficiente, Citibox y Marsh Risk & Capital han desplegado una nueva estructura societaria. Planean crear en cada ciudad a la que lleguen una filial, de las que cuelgue la deuda con la que pretenden realizar la expansión allí, y que cuenten con la exclusividad para instalar los buzones de Citibox en esa área. La matriz, propietaria únicamente de la tecnología, pagará a sus propias filiales un canon por el uso de los buzones que son de su propiedad. La captación de nuevos clientes y la obtención de los permisos de las comunidades de vecinos correrán a cargo de empresas externas.
La compañía busca con estas rondas de deuda obtener el respaldo de grandes gestoras nacionales e internacionales de fondos de capital riesgo, que además puedan eventualmente entrar en el capital.
Ahora los principales accionistas de Citibox, además de sus fundadores, son Bernardo Hernández, creador de Idealista y de Tuenti, los fondos de venture capital Bonsai Partners (accionista de Wallapop y Glovo, entre otras empresas) y Big Sur, así como los vehículos para este tipo de inversiones de CaixaBank y Sabadell. A largo plazo, Bernabeu explica que buscarán un socio industrial o financiero que respalde el plan de expansión. Y, finalmente, contemplan una eventual salida a Bolsa.
La hoja de ruta de Citibox implica ir amortizando deuda a través de posibles conversiones en capital, pero fundamentalmente con el flujo de caja futuro. Solo con el despliegue en Madrid espera alcanzar los 920.000 usuarios activos, que realicen en torno a 1,2 millones de transacciones al mes, lo que les permita elevar la facturación hasta los 600.000 euros. El servicio de Citibox es gratuito tanto para los usuarios como para las comunidades de propietarios, de manera que su modelo de negocio pasa por cargar una comisión a los transportistas en base al “fuerte ahorro” que su sistema les garantiza.
Un ahorro de 0,8 euros por cada paquete
Transportistas. Citibox tiene acuerdos con todas las empresas de transporte, a las que cobra una comisión. A cambio, les ahorra unos 0,8 euros por paquete, gracias a tres factores: el tiempo que ahorra el repartidor, desde los casi cinco minutos de una entrega clásica a poco más de 40 segundos, que no haya que concertar la entrega y que se garantiza el 100% de las entregas, cuando ahora las fallidas están en el 17%.
Facturación y valoración. Los ingresos previstos en el plan de negocio de Citibox para 2019 son de 3,2 millones, con el objetivo de llegar a 188 en 2022, cuando conseguiría un beneficio bruto de explotación (ebitda) de 73 millones. La valoración de la firma según la última ampliación de capital, el pasado mayo, es de 26,3 millones. Desde 2015, ha levantado capital por unos siete millones de euros.