El Banco de España da un vuelco a su área de supervisión de entidades
Pretende mejorar el control de las firmas que no reacen bajo la supervisión europea y estrechar la cooperación entre las divisiones de macro y de micro
El Banco de España aprobó el viernes la reestructuración de la Dirección General de Supervisión, el área de la entidad que se responsabiliza del control de las entidades financieras, y que dirige Mercedes Olano desde finales de octubre. Los cambios suponen, indica el Banco de España, un nuevo paso en la adaptación de la institución a la realidad del supervisor bancario europeo, de cuya creación se cumplen ya cuatro años.
El banco central nacional aspira a reforzar la supervisión de las entidades menos significativas, es decir, aquéllas cuyo control reace directamente en el Banco de España. Las entidades mayores (BBVA, Santander, CaixaBank, Bankia, Sabadell, Liberbank, Abanca, Unicaja, Ibercaja, Kutxabank y las cajas rurales) están sujetas a la supervisión europea. De esta forma, busca un mayor control en el 15% del sistema financiero que sigue bajo su responsabilidad. El segundo objetivo es potenciar la coordinación dentro del banco y con el Mecanismo Único de Supervisión (MUS) y otros supervisores nacionales.
“Transcurridos cuatro años desde la integración del Banco de España en la estructura del Mecanismo Único de Supervisión, se considera que hay aspectos organizativos que requieren ajustes adicionales”, dice la nota oficial. Y añade que con los cambios se busca “reforzar la supervisión de las entidades menos significativas, responsabilidad directa del Banco de España y potenciar la coordinación” interna y con el MUS. También se tratará de facilitar la coordinación con “otros organismos supervisores nacionales, para lo cual se reorganizan las funciones de análisis horizontal de la Dirección General”, en referencia a la Comisión Nacional del Mercado de Valores o el ICAC, organismo de control de los auditores.
Los cambios en la Dirección General de Supervisión vienen siendo reclamados por políticos e inspectores principalmente. De hecho, consideran que fue una de las partes negativas de la crisis financiera. Por ello, lo que intenta el nuevo equipo del Banco de España, con nuevo gobernador, Pablo Hernández de Cos, y subgobernadora, Margarita Delgado, es poner soluciones a algunos de los problemas que se detectaron en el Banco de España y con los que se habían podido aminorar ciertos escollos en las entidades financieras que se vieron arrastradas por la burbuja inmobiliaria y la alta morosidad.
Ahora se pretende acercar más la supervisión al Banco Central Europeo (BCE), eliminando duplicidades entre ambas. instituciones. Otro objetivo es estrechar la comunicación entre los departamentos de macroeconomía y los de microeconomía con una mayor cooperación. La autoridad macroprudencial es un ejemplo de la necesidad que ha detectado el Gobierno y el Banco de España en estrechar los lazos entre estas dos divisiones económicas.
Otra novedad es el proyecto de hacer rotar a los inspectores entre entidades de gran tamaño como BBVA, Santander o CaixaBank por ejemplo, y firmas de menor dimensión, como las cajas rurales o la banca mediana. Con esta iniciativa, que afectará a un tercio aproximadamente de los inspectores y responsables de supervisión, con ascensos y nuevas responsabilidades en algunos casos, se pretende evitar que unos inspectores estén más motivados que otros por supervisar a los principales bancos, y otros a las firmas más pequeñas, una vez que el Banco de España no va a aumentar su plantilla respecto a la que tuvo antes de que el BCE se hiciera cargo de la supervisión de la banca europea, y se incorporaran a esta institución unos 100 inspecrtores españoles.
Esta medida, además, prevé reforzar la supervisión para evitar la caída de cualquier entidad, sobre todo de las más pequeñas, que son al final las que están vigiladas por el Banco de España, y que representan el 15% del sector financiero español, frente a las de mayor tamaño, cuya supervisión corresponde al BCE, aunque con la ayuda de la institución española que dirige Hernández de Cos.
En el Banco de España parece que se han concienciado de que, pese a que la caída de una entidad pequeña no supone un riesgo sistémico, sí puede representar un riesgo reputacional. Esta es otra de las cosas aprendidas de la crisis financiera, explican fuentes financieras, que reconocen que ahora toca mejorar la imagen del sector y del Banco de España.
La Dirección General de Supervisión queda ahora organizada en torno a dos direcciones generales adjuntas. Al frente de la primera de ellas, Francisco Monzón, que coordinará tres departamentos, incluidos los que supervisan las entidades españolas más grandes y las filiales y sucursales de bancos europeos. Y en la segunda, Alberto Ríos, del que colgarán otros dos departamentos, el que mantiene las competencias de inspección “in situ” de las grandes entidades, entre otras funciones, y uno que se organiza en cinco grupos, incluido el de prevención de blanqueo de capitales, análisis de riesgo,o test de estrés.
Planificación. La directora general de supervisión tendrá a su cargo el servicio de Coordinación del Mecanismo Unico de Supervisión, con Javier Torres al frente, y el grupo de nueva creación de Organización y Calidad, con Gabriel Casado como responsable. Esta nueva pata ”agrupará las funciones relativas a la planificación y formación del personal y a la revisión de procesos de la Dirección General”. Esta reorganización ha sido ratificada por el Consejo de Gobierno de la institución.
Acelerar los cambios. En una reciente reunión del cuerpo de inspectores y supervisores con la directora general de supervisión, Mercedes Olano, ya les explicó el objetivo de introducir cambios en este área, aunque todos interprearon que estas modificaiones se llevarían a cabo en enero. Sin embargo, la nueva cúpula del Banco de España ha optado por acelerar estas iniciativas para comenzar el año con un esquema y jefes diferentes.
Opinión. Ahora falta si estos cambios convencen a los inspectores y al final se logra poner fin a las diferencias entre la cúpula del Banco de España y este colectivo, Aunque este cuerpo laboral ha entregado en el Congreso un documento con los cambios que creen que deberían introducirse en la supervisión y en su profesión.