Ocho claves para controlar los gastos en verano
Un documento elaborado por EFPA España ofrece consejos para no descuidar el ahorro Elaborar un presupuesto o evitar las compras compulsivas pueden evitar disgustos económicos
A la playa, a la montaña, al pueblo o de turismo urbano... cualquier plan es válido después de un año esperando las vacaciones. Pero, a juicio de los expertos, el descanso estival no "debe suponer un paréntesis en la planificación de nuestras finanzas personales". Según un documento del departamento de Educación Financiera de EFPA España, conviene seguir unas pautas para evitar gastar más de la cuenta y afrontar la vuelta a la rutina sin sobresaltos económicos.
1. Elaborar un presupuesto: Hay que planificar con antelación un presupuesto realista, ajustado a la capacidad económica.
2. Evitar endeudarse con los créditos rápidos: Realizar un plan de ahorro con varios meses de antelación para evitar tener que recurrir a los créditos rápidos que conllevan costes elevados
3. No abusar de los pagos a plazos de las tarjetas: recurrir al dinero de plástico es habitual en vacaciones, pero no es conveniente el uso excesivo de tarjetas de crédito para aplazar diferentes pagos. Si la cantidad de cargos es muy elevada, podrá conllevar el pago de altas comisiones, en concepto de intereses, que elevarán de forma muy abrupta los gastos. En caso de contratar alguna tarjeta, hay que mirar con lupa las condiciones. Por otro lado, las tarjetas de descuentos que promocionan tanto bancos como empresas, con el fin de fidelizar a sus clientes a través de descuentos, pueden ser muy útiles para optimizar los gastos estivales. También hay que fijarse en la letra pequeña.
4. Informarse de los tipos de cambio de divisa si se viaja a otro país con otra moneda: Antes de viajar fuera de España se aconseja revisar con el banco las condiciones de retirada de efectivo. Si el destino es fuera de la zona euro hay que tener en cuenta el cambio de divisa, observar las fluctuaciones y eligir el mejor momento para cambiar. Si se prefiere el pago con tarjeta hay que controlar los costes asociados para contemplarlos en el presupuesto del viaje. "No obstante, puede ser una mejor alternativa al pago en cash, que puede suponer una pérdida de poder adquisitivo porque suelen tener peor cambio".
5. Utilizar comparadores: Aunque pueda resultar una actividad tediosa, merece la pena dedicar un poco de esfuerzo a la comparación de precios en agencias, hoteles y transportes, siempre prestando especial atención a las condiciones escondidas en la letra pequeña. Hay que estar atento a los horarios, condiciones de cancelación, etc.
6. Dejar resueltos posibles vencimientos de productos financieros: Revisar las condiciones de los productos financieros que se tengan contratados por si coinicide que alguno vence en las fechas de vacaciones. No hay que descartar asesoramiento profesional para buscar alternativas de imversión.
7. Cuidado con las compras compulsivas: Más allá de los gastos fijos en partidas como el transporte, alojamiento o la alimentación, no está demás incluir en el presupuesto una pequeña cantidad diaria a otro tipo de gastos como caprichos.
8. Vuelta a la rutina con una planificación financiera: Coincidiendo con la vuelta a nuestra rutina diaria, es un buen momento para acudir a la entidad de confianza y solicitar una cita con un asesor financiero cualificado que pueda resolver todas tus dudas sobre los productos financieros más adecuados, préstamos, hipotecas, ahorro para la jubilación