Pablo Lladó: “Si los tipos siguen mucho tiempo a cero podría haber una burbuja en renta fija”
Considera que todas las comunidades volverán a emitir deuda, salvo Cataluña Cree que los bonos verdes y sociales seguirán creciendo al 20% anual
La hoja de ruta fijada por el Banco Central Europeo marca que a finales de este año la institución dejará, previsiblemente, de comprar bonos, y que la primera subida de los tipos de interés podría llegar después del verano de 2019. Unas políticas que obligarán a España, y al resto de países europeos, a pagar más su financiación, pero que según Pablo Lladó suponen la vuelta a la normalidad. “Al final, se trata de que el Tesoro español emita bien y que dé rentabilidad positiva a todos sus bonos”, apunta el director de mercado de capitales de Crédit Agricole.
- R. ¿Cuál es su balance del primer semestre del año en el mercado de bonos?
- R. Empezó muy activo. Iniciamos 2018 como acabó 2017, con muchas operaciones, especialmente corporativas, aprovechando los bajos tipos de interés. Durante el primer trimestre de este año hemos tenido una evolución muy positiva del crédito, con muchas operaciones y unos tipos mínimos anuales jamás vistos. El mercado se ha ido deteriorando a partir de marzo, llegando en junio y julio a estar casi inoperativo.
- R. ¿Qué medidas se esperan del BCE en los próximos meses?
- R. El BCE ha dejado claro que dejará de comprar bonos a finales de año. Ha sido el comprador más activo, ha llegado a adquirir hasta el 50% de las emisiones de cédulas en Europa. En septiembre seguirán las compras, pero irán disminuyendo. Y después del verano de 2019, tendremos la primera subida de tipos de interés.
- R. ¿Cómo afectarán a la deuda española estas decisiones?
- R. El cupón de la deuda española, sobre todo los plazos más largos, empezará a repuntar. La decisión de la institución presidida por Mario Draghi de dejar de comprar deuda hace que el cupón que deba pagar el Reino de España sea más alto. Esto supone volver a la normalidad. No tiene sentido que con la recuperación económica y una inflación que empieza a estar ligeramente alta, la deuda española esté por debajo del euríbor. Al final, se trata de que el Tesoro español emita bien y que dé rentabilidad positiva.
- R. Tras el parón estival, ¿qué ocurrirá en los bonos?
- R. Esperamos una recuperación y estabilidad en el mercado después del verano, y que Italia haga un buen presupuesto y Trump deje de gobernar solo para los americanos y dé un poquito de estabilidad a la economía mundial. Si no hay sustos, tendremos un segundo semestre positivo.
- R. El País Vasco ha abierto la puerta a las emisiones públicas con un bono verde que logró una elevada demanda, ¿qué otras autonomías podrían sumarse?
- R. Este año es un poco precipitado, pero las comunidades autónomas volverán al mercado de capitales, excepto Cataluña, hasta que tenga resuelto el problema de la independencia. Y deberían emitir sobre todo bonos sociales o verdes, es la tendencia.
- R. Con tipos de interés tan bajos, ¿podría haber una burbuja? ¿Hemos aprendido algo de crisis anteriores?
- R. Las necesidades de dar rentabilidad a las carteras cuando los tipos están muy bajos marcan una tendencia hacia productos con una rentabilidad más alta o a invertir en vencimientos muy largos. Cuando los tipos suben, algunos de estos productos pueden causar grandes pérdidas. Creo que a corto plazo no va a haber burbuja pero, si se mantuvieran los tipos a cero durante mucho tiempo, podría haberla.
- R. ¿Cuáles son los mayores riesgos para el inversor minorista de bonos?
- R. El inversor minorista tiene que contentarse ahora con rentabilidades muy bajas. El riesgo es que intente sacar rendimientos altos y se vaya a productos estructurados, emisiones con vencimiento muy largo o emisiones corporativas con mucho riesgo (high yield, en la jerga). Cuando suben los tipos se producen grandes pérdidas, por lo que invertir asumiendo riesgos tan elevados supone pan para hoy y hambre para mañana.
- R. ¿Cuáles son las previsiones en el mercado de bonos verdes?
- R. El mercado sostenible, que incluye el bono verde y el social, va a seguir aumentando a un ritmo del 20% anual. Este año hemos visto emisores nuevos: BBVA, ACS o el Gobierno vasco. Es una tendencia que va a más. De aquí a pocos años veremos que prácticamente todas las comunidades autónomas emitirán bonos sociales o verdes y seguirán los mismos pasos las entidades financieras y los corporates. Es un mercado que viene para quedarse. Por ello, Crédit Agricole ha apostado muy fuerte por este mercado. Cada vez habrá más emisores que recurrentemente emitirán bonos sostenibles. Iberdrola es el mayor emisor corporativo verde, todo lo que ha lanzado este año ha sido verde. Mientras que el emisor de referencia en bonos sociales es el ICO.
- R. ¿Qué emisores se estrenarán?
- R. En el último trimestre saldrán todas los grandes empresas y la gran banca. Esperamos un mercado muy activo a partir del mes de septiembre porque hay necesidad de financiación y porque llevamos meses con un mercado parado y mucha incertidumbre. Está claro que hay expectativas de subida de tipos y que poco a poco, con la retirada de estímulos del BCE, van a ir subiendo los spreads y los tipos. Si el mercado se estabiliza, nuestra recomendación es emitir cuanto antes.