El móvil se ha convertido en una herramienta perfecta para orientarnos en nuestro lugar de destino, con apps como Google Maps o Apple Maps. Normalmente colocamos el teléfono en un soporte para utilizarlo. Algo muy peligroso si tenemos en cuenta que lo más probable es que le esté dando el sol continuamente, además del efecto lupa que hace la luna delantera del vehículo. Por lo tanto, aléjalo del salpicadero y por supuesto no te lo olvides en la guantera.El uso prolongado del teléfono suele originar que este se caliente, y dependiendo del modelo, puede que lo haga en mayor o menor medida. Una buena forma de combatir el sobrecalentamiento del teléfono es utilizarlo durante treinta minutos y dejarlo descansar unos 10. Y así sucesivamente, evitando que el uso continuado pueda dañar el teléfono.Las fundas del teléfono son los peores enemigos del dispositivo en verano. Pensar por un momento si le colocárais una funda a vuestro ordenador, lo que pasaría. Pues con el móvil ocurre lo mismo, ya que las fundas dan mucho más calor al conjunto. El dispositivo suele calentarse en su parte trasera, que es precisamente la que suele estar recubierta por la funda.La carga de la batería es uno de esos momentos críticos para poder luchar contra el calor. Ya que la mayoría de móviles se calientan mientras se está cargando la batería, por lo que en días de mucho calor es recomendable cargarlo por la noche. De esta forma la temperatura ambiental ayudará a que se caliente menos.El software tiene mucho que decir en el calentamiento del móvil, porque cuantas más apps y procesos estén en activo, más fácil será que se caliente. Por esa razón existen apps como la de Cooler para Android. Esta app cierra las apps necesarias para que el rendimiento del teléfono se reduzca y no pueda dar pie a ningún sobrecalentamiento.
