Arco mira al futuro en busca de nuevos coleccionistas
La feria de arte apuesta este año por un tema central: el futuro Las mujeres y un nuevo perfil de comprador serán claves en esta edición
Con un marcado carácter femenino, y con una mirada fijada en un futuro “sin futurismos”, se presentó el viernes en el Museo Thyssen una nueva edición de Arco Madrid, la feria de arte contemporáneo organizada por Ifema que dará comienzo el próximo 21 de febrero y que este año cumple su 37ª edición.
Una muestra que mantendrá las dimensiones del año pasado, en la que participarán 208 galerías de 29 países, de las cuales 160 de estas compondrán el programa general y un centenar son extranjeras. Una cita que quiere aprovechar el tirón del mercado del arte, que mueve al año cerca de 400 millones de euros en España, con un enfoque renovado respecto a otras ediciones.La principal novedad es la ausencia de un país invitado, como fue el año pasado Argentina, en el que sus artistas tuvieron la oportunidad de promocionarse. En esta ocasión, la apuesta es por una temática que sirva como hilo conductor de la feria. En este caso, el futuro. “Esto permite recuperar relaciones con galerías de otros países. Además, los nacionalismos en el mundo del arte están más en duda que nunca”, afirmó el director de Arco, Carlos Urroz, quien subrayó el carácter ferial del evento:“No hay que olvidar que los cuadros se exponen para ser vendidos”, apuntó.
La feria se dividirá en dos grandes áreas: el programa general y los programas comisariados. Entre estos, el protagonista será El futuro no es lo que va a pasar, sino lo que vamos a hacer, donde 19 artistas y 19 galerías aportarán su visión de la complejidad que el futuro trae consigo. “El futuro es un concepto amplio y complicado. Nosotros lo vemos como algo donde convivirán muchas formas de entender el presente. Y el arte contemporáneo se basa en esa coexistencia de lenguajes, de materiales, en la pluralidad de canales...”, describió Chus Martínez, una de las tres comisarias de este espacio, junto a Elise Lammer y Rosa Lleó. Los participantes en este programa cubrirán una variedad de generaciones y zonas geográficas: galerías como Bortolami, de Nueva York; Nara Roesler, de São Paulo, o Gregor Podnar, de Berlín;y obras de artistas como Salvador Dalí, Eduardo Navarro, Maryam Jafri o Július Koller. En esta área otra protagonista será la paridad. El mayor protagonismo de la mujer es algo que la feria ha buscado en esta edición, ya que, además,todas las comisarias de los programas son mujeres. Así sucede también en Diálogos y Opening, los otros dos espacios temáticos de la feria.
En cuanto al programa general, destaca el retorno de galerías como Alexander and Bonin y Team, de Nueva York, y de Thaddaeus Ropac, de París, además de una notable presencia de expositores latinoamericanos, que representan el 68% de la participación internacional, que supera el centenar. También en clave de futuro se enmarcan los esfuerzos de la organización por captar nuevos coleccionistas. “Queremos buscar un nuevo público y, sobre todo, que la gente pierda el miedo a coleccionar”, aseguró Urroz. Una de las medidas dirigidas a ello es indicar con la etiqueta mecomprounaobra aquellas pinturas con un precio inferior a 5.000 euros. “En Arco hay más obras de las que se piensa por debajo de ese precio. También las hay caras, pero el mensaje es que hay para quien quiera iniciarse en el coleccionismo”, insistió Urroz.
Además, la Fundación Arco celebrará una charla sobre nuevo coleccionismo, y también activará el programa de asesoramiento en la compra de obras, con la ayuda de First Collectors by Fundación Banco Santander, así como el Foro de Coleccionismo. En dos semanas, el arte contemporáneo tendrá su cita de referencia en Madrid.