Las telecos aligeran balances para retomar los planes de recompra de acciones
Orange y Vodafone, entre los grupos que estudian aprobar nuevas compras La reducción de deuda, tras la venta de activos, impulsará estos movimientos
Las grandes operadoras europeas parecen estar ahora en mejor disposición para retomar los planes de recompra de acciones. Así, los balances de las telecos del Viejo Continente están en una mejor situación, según Morgan Stanley, tras las ventas de activos considerados no estratégicos: la participación en la británica EE por parte de Orange, las divisiones en Asia Central y Europa por parte de Telia, la salida de la India de Telenor o la creación de una joint venture en la propia India por parte de Vodafone.
Los analistas del banco de inversión creen que Vodafone y Orange podrían explorar operaciones en este sentido gracias a la mejora de su generación de caja, recordando que en 2019 tendrán un ratio de deuda neta frente a ebitda de 1,9 y 1,7 veces, respectivamente.
De hecho, algunas empresas del sector ya han anunciado la puesta en marcha de estos planes. Entre ellas figura la citada Telenor, que lanzó un programa para recomprar 15,2 millones de acciones, representativas de un 1% del capital, con el objetivo de devolver a los accionistas cerca de 1.900 millones de coronas noruegas. También el Estado nórdico, principal accionista con un 53% del capital, anunció la adquisición de un porcentaje similar de las acciones.
La rusa MTS también está enfrascada en estas operaciones, mientras que Liberty, con una amplia presencia en Europa, anunció a final de diciembre un programa para recomprar títulos propios y devolver a los inversores en torno a 2.000 millones de dólares (unos 1.630 millones de euros).
Deutsche Telekom comunicó a principios del mes pasado que su filial estadounidense T-Mobile USA había aprobado un plan para recomprar acciones por cerca de 1.500 millones de dólares hasta final de 2018. La decisión, que vino tras el fracaso en el intento de fusión con Sprint, está respaldada en la fuerte capacidad generación de caja de T-Mobile USA. Con este movimiento, Deutsche Telekom busca ampliar su presencia en el capital de la filial.
En España, MásMóvil recompró durante el segundo semestre de 2017 un total de 262.578 acciones, que suponen un 1,31% del capital. La teleco transmitió un 0,87% de su capital para afrontar la compra de Embou.
Las dudas se centran en operadoras que están envueltas en procesos de desapalancamiento, entre las que figuran Altice y Telefónica. El grupo español mantuvo una gran actividad en la recompra de acciones, dentro de sus planes de retribución al accionista, hasta la llegada a la presidencia de José María Álvarez-Pallete, que apostó por reducir deuda por la vía orgánica. De hecho, entre 2015 y 2016, la teleco amortizó un 3% de su capital. En su última actualización, del 26 de septiembre, Telefónica señaló que tenía en autocartera un 1,26% de su capital.
El mercado está pendiente de estos movimientos por su efecto en la cotización. Por ejemplo, el día en el que Telenor anunció su intención recomprar acciones, el precio de los títulos se disparó un 10%. Estas estrategias van a tener una amplia relevancia dada la actual depresión que la mayoría de las telecos están viviendo en Bolsa, con su peor momento en más de una década. Los inversores están a la espera.
Futuro del dividendo
El mercado está a la espera de las posibles decisiones de las telecos europeas en torno al dividendo, pilar fundamental de la remuneración al accionista. En los últimos tiempos, algunas compañías han optado por elevar esta retribución por la mejora de las cuentas. Orange se comprometió a abonar 0,60 euros por acción hasta 2018 dentro de su plan estratégico. No obstante, el pasado año, el consejo propuso a la junta el pago de un dividendo con cargo a 2017 de 0,65 euros por título.
En la misma línea, Vodafone aprobó un aumento del dividendo interino del 2,1% hasta 4,84 céntimos por acción, dentro de la estrategia de la teleco de elevar esta remuneración. En el mercado se apuesta a una rentabilidad por dividendo en el conjunto del sector en Europa del 4,8% en 2019.